“No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable perfecta”
— Romanos 12:2
“Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad”
— Filipenses 4:8
“Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra”
— Colosenses 3:2
“Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazónPorque de él mana la vida”
— Proverbios 4:23
“No lo que entra en la boca contamina al hombre; mas lo que sale de la boca, esto contamina al hombre”
— Mateo 15:11
“Porque cual es su pensamiento en su corazón, tal es élCome bebe, te diráMas su corazón no está contigo”
— Proverbios 23:7
“Derribando argumentos toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo”
— 2 Corintios 10:5
“No pondré delante de mis ojos cosa injustaAborrezco la obra de los que se desvíanNinguno de ellos se acercará a mí”
— Salmos 101:3
“No participéis en las obras infructuosas de las tinieblas, sino más bien reprendedlas”
— Efesios 5:11
“El corazón entendido busca la sabiduríaMas la boca de los necios se alimenta de necedades”
— Proverbios 15:14
“La lámpara del cuerpo es el ojo; así que, si tu ojo es bueno, todo tu cuerpo estará lleno de luz; pero si tu ojo es maligno, todo tu cuerpo estará en tinieblas. Así que, si la luz que en ti hay es tinieblas, ¿cuántas no serán las mismas tinieblas?”
— Mateo 6:22-23
“Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios”
— 1 Corintios 10:31
“En mi corazón he guardado tus dichosPara no pecar contra ti”
— Salmos 119:11
“Hice pacto con mis ojos¿Cómo, pues, había yo de mirar a una virgen?”
— Job 31:1
“Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley”
— Gálatas 5:22-23
“¿Por qué gastáis el dinero en lo que no es pan, vuestro trabajo en lo que no sacia? Oídme atentamente, comed del bien, se deleitará vuestra alma con grosura”
— Isaías 55:2
“Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que usa bien la palabra de verdad”
— 2 Timoteo 2:15
“Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día de noche meditarás en él, para que guardes hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, todo te saldrá bien”
— Josué 1:8
“No os dejéis llevar de doctrinas diversas extrañas; porque buena cosa es afirmar el corazón con la gracia, no con viandas, que nunca aprovecharon a los que se han ocupado de ellas”
— Hebreos 13:9
“Lámpara es a mis pies tu palabraY lumbrera a mi camino”
— Salmos 119:105
“El corazón alegre constituye buen remedioMas el espíritu triste seca los huesos”
— Proverbios 17:22
“Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas han salido por el mundo”
— 1 Juan 4:1
“Si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente sin reproche, le será dada”
— Santiago 1:5
“Toda la Escritura es inspirada por Dios, útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra”
— 2 Timoteo 3:16-17
“Desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis para salvación”
— 1 Pedro 2:2
“Porque escudo es la ciencia, escudo es el dinero; mas la sabiduría excede, en que da vida a sus poseedores”
— Eclesiastés 7:12
“Sean gratos los dichos de mi boca la meditación de mi corazón delante de tiOh Jehová, roca mía, redentor mío”
— Salmos 19:14
“El hombre bueno, del buen tesoro de su corazón saca lo bueno; el hombre malo, del mal tesoro de su corazón saca lo malo; porque de la abundancia del corazón habla la boca”
— Lucas 6:45
“Examinadlo todo; retened lo bueno”
— 1 Tesalonicenses 5:21
“¡Oh, cuánto amo yo tu leyTodo el día es ella mi meditación”
— Salmos 119:97
“La muerte la vida están en poder de la lenguaY el que la ama comerá de sus frutos”
— Proverbios 18:21
“Mirad que nadie os engañpor medio de filosofías huecas sutilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, no según Cristo”
— Colosenses 2:8
“Por lo cualSalid de en medio de ellos, apartaos, dice el SeñorY no toquéis lo inmundoY yo os recibiré”
— 2 Corintios 6:17
“Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, huirá de vosotros”
— Santiago 4:7
“Panal de miel son los dichos suavesSuavidad al alma medicina para los huesos”
— Proverbios 16:24
“Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración ruego, con acción de gracias. la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones vuestros pensamientos en Cristo Jesús”
— Filipenses 4:6-7
“Aparta mis ojos, que no vean la vanidadAvívame en tu camino”
— Salmos 119:37
“Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes”
— Efesios 4:29
“¡Generación de víboras! ¿Cómo podéis hablar lo bueno, siendo malos? Porque de la abundancia del corazón habla la boca”
— Mateo 12:34
“Recuérdales que se sujeten a los gobernantes autoridades, que obedezcan, que estén dispuestos a toda buena obra”
— Tito 3:1
“No erréis; las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres”
— 1 Corintios 15:33
“Estos son fuentes sin agua, nubes empujadas por la tormenta; para los cuales la más densa oscuridad está reservada para siempre”
— 2 Pedro 2:17
“El que anda con sabios, sabio seráMas el que se junta con necios será quebrantado”
— Proverbios 13:20
“Porque las cosas que se escribieron antes, para nuestra enseñanza se escribieron, a fin de que por la paciencia la consolación de las Escrituras, tengamos esperanza”
— Romanos 15:4
“Ocúpate en estas cosas; permanece en ellas, para que tu aprovechamiento sea manifiesto a todos”
— 1 Timoteo 4:15
“¡Cuán dulces son a mi paladar tus palabrasMás que la miel a mi boca”
— Salmos 119:103
“No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿qué comunión la luz con las tinieblas? ¿qué concordia Cristo con Belial? ¿O qué parte el creyente con el incrédulo? ¿qué acuerdo hay entre el templo de Dios los ídolos? Porque vosotros sois el templo del Dios viviente, como Dios dijoHabitaré andaré entre ellosY seré su DiosY ellos serán mi puebloPor lo cualSalid de en medio de ellos, apartaos, dice el SeñorY no toquéis lo inmundoY yo os recibiré”
— 2 Corintios 6:14-17
“No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él. Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo. el mundo pasa, sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre”
— 1 Juan 2:15-17