“Guardaos de hacer vuestra justicia delante de los hombres, para ser vistos de ellos; de otra manera no tendréis recompensa de vuestro Padre que está en los cielos”
— Mateo 6:1
“Antes, hacen todas sus obras para ser vistos por los hombres. Pues ensanchan sus filacterias, extienden los flecos de sus mantos”
— Mateo 23:5
“Cuando ores, no seas como los hipócritas; porque ellos aman el orar en pie en las sinagogas en las esquinas de las calles, para ser vistos de los hombres; de cierto os digo que ya tienen su recompensa”
— Mateo 6:5
“¡Ay de vosotros, escribas fariseos, hipócritas! porque devoráis las casas de las viudas, como pretexto hacéis largas oraciones; por esto recibiréis mayor condenación”
— Mateo 23:14
“Que devoran las casas de las viudas, por pretexto hacen largas oraciones; estos recibirán mayor condenación”
— Lucas 20:47
“Que devoran las casas de las viudas, por pretexto hacen largas oraciones. Estos recibirán mayor condenación”
— Marcos 12:40
“¡Ay de vosotros, fariseos! que amáis las primeras sillas en las sinagogas, las salutaciones en las plazas”
— Lucas 11:43
“Observando cómo escogían los primeros asientos a la mesa, refirió a los convidados una parábola, diciéndoles”
— Lucas 14:7
“Antes, hacen todas sus obras para ser vistos por los hombres. Pues ensanchan sus filacterias, extienden los flecos de sus mantos”
— Mateo 23:5
“Sino que lo necio del mundo escogió Dios, para avergonzar a los sabios; lo débil del mundo escogió Dios, para avergonzar a lo fuerte”
— 1 Corintios 1:27
“Cuando, pues, des limosna, no hagas tocar trompeta delante de ti, como hacen los hipócritas en las sinagogas en las calles, para ser alabados por los hombres; de cierto os digo que ya tienen su recompensa”
— Mateo 6:2
“¡Ay de vosotros, escribas fariseos, hipócritas! porque sois semejantes a sepulcros blanqueados, que por fuera, a la verdad, se muestran hermosos, mas por dentro están llenos de huesos de muertos de toda inmundicia”
— Mateo 23:27
“El fariseo, puesto en pie, oraba consigo mismo de esta manera: Dios, te doy gracias porque no soy como los otros hombres, ladrones, injustos, adúlteros, ni aun como este publicano”
— Lucas 18:11
“Porque amaban más la gloria de los hombres que la gloria de Dios”
— Juan 12:43
“Sino que según fuimos aprobados por Dios para que se nos confiase el evangelio, así hablamos; no como para agradar a los hombres, sino a Dios, que prueba nuestros corazones”
— 1 Tesalonicenses 2:4
“Porque si en vuestra congregación entra un hombre con anillo de oro con ropa espléndida, también entra un pobre con vestido andrajoso”
— Santiago 2:2
“Miráis con agrado al que trae la ropa espléndida le decís: Siéntate tú aquí en buen lugar; decís al pobre: Estate tú allí en pie, o siéntate aquí bajo mi estrado”
— Santiago 2:3
“¿no hacéis distinciones entre vosotros mismos, venís a ser jueces con malos pensamientos?”
— Santiago 2:4
“Pero vosotros habéis afrentado al pobre. ¿No os oprimen los ricos, no son ellos los mismos que os arrastran a los tribunales?”
— Santiago 2:6
“Apacentad la grey de Dios que está entre vosotros, cuidando de ella, no por fuerza, sino voluntariamente; no por ganancia deshonesta, sino con ánimo pronto”
— 1 Pedro 5:2
“Porque habrá hombres amadores de sí mismos, avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, impíos”
— 2 Timoteo 3:2
“Todos los que quieren agradar en la carne, estos os obligan a que os circuncidéis, solamente para no padecer persecución a causa de la cruz de Cristo”
— Gálatas 6:12
“Porque ni aun los mismos que se circuncidan guardan la ley; pero quieren que vosotros os circuncidéis, para gloriarse en vuestra carne”
— Gálatas 6:13
“Esos perros comilones son insaciables; los pastores mismos no saben entender; todos ellos siguen sus propios caminos, cada uno busca su propio provecho, cada uno por su lado”
— Isaías 56:11
“Cercando andan los malosCuando la vileza es exaltada entre los hijos de los hombres”
— Salmos 12:8
“Las riquezas del rico son su ciudad fortificadaY como un muro alto en su imaginación”
— Proverbios 18:11
“Abominación es a los justos el hombre inicuoY abominación es al impío el de caminos rectos”
— Proverbios 29:27
“He visto asimismo que todo trabajo toda excelencia de obras despierta la envidia del hombre contra su prójimo. También esto es vanidad aflicción de espíritu”
— Eclesiastés 4:4
“El que ama el dinero, no se saciará de dinero; el que ama el mucho tener, no sacará fruto. También esto es vanidad”
— Eclesiastés 5:10
“Ciertamente la opresión hace entontecer al sabio, las dádivas corrompen el corazón”
— Eclesiastés 7:7
“Quítense de vosotros toda amargura, enojo, ira, gritería maledicencia, toda malicia”
— Efesios 4:31
“Todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor no para los hombres”
— Colosenses 3:23
“Porque los que quieren enriquecerse caen en tentación lazo, en muchas codicias necias dañosas, que hunden a los hombres en destrucción perdición”
— 1 Timoteo 6:9
“Sabiendo que el tal se ha pervertido, peca está condenado por su propio juicio”
— Tito 3:11
“Por avaricia harán mercadería de vosotros con palabras fingidas. Sobre los tales ya de largo tiempo la condenación no se tarda, su perdición no se duerme”
— 2 Pedro 2:3
“Porque habrá hombres amadores de sí mismos, avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, impíos”
— 2 Timoteo 3:2
“Mas los malos hombres los engañadores irán de mal en peor, engañando siendo engañados”
— 2 Timoteo 3:13
“Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo”
— 1 Juan 2:16
“Porque tú dices: Yo soy rico, me he enriquecido, de ninguna cosa tengo necesidad; no sabes que tú eres un desventurado, miserable, pobre, ciego desnudo”
— Apocalipsis 3:17
“Porque tú dices: Yo soy rico, me he enriquecido, de ninguna cosa tengo necesidad; no sabes que tú eres un desventurado, miserable, pobre, ciego desnudo”
— Apocalipsis 3:17
“Altivez de ojos, orgullo de corazónY pensamiento de impíos, son pecado”
— Proverbios 21:4
“El altivo de ánimo suscita contiendasMas el que confía en Jehová prosperará”
— Proverbios 28:25
“El hombre iracundo levanta contiendasY el furioso muchas veces peca”
— Proverbios 29:22
“Jehová respondió a Samuel: No mires a su parecer, ni a lo grande de su estatura, porque yo lo desecho; porque Jehová no mira lo que mira el hombre; pues el hombre mira lo que está delante de sus ojos, pero Jehová mira el corazón”
— 1 Samuel 16:7
“Así dijo Jehová: No se alabe el sabio en su sabiduría, ni en su valentía se alabe el valiente, ni el rico se alabe en sus riquezas”
— Jeremías 9:23
“Yo Jehová, que escudriño la mente, que pruebo el corazón, para dar a cada uno según su camino, según el fruto de sus obras”
— Jeremías 17:10
“Inclina mi corazón a tus testimoniosY no a la avaricia”
— Salmos 119:36
“Aparta mis ojos, que no vean la vanidadAvívame en tu camino”
— Salmos 119:37
“Pues, ¿busco ahora el favor de los hombres, o el de Dios? ¿O trato de agradar a los hombres? Pues si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de Cristo”
— Gálatas 1:10
“Sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia, porque a Cristo el Señor servís”
— Colosenses 3:24
“No hay cosa creada que no sea manifiesta en su presencia; antes bien todas las cosas están desnudas abiertas a los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta”
— Hebreos 4:13
“No nos recomendamos, pues, otra vez a vosotros, sino os damos ocasión de gloriaros por nosotros, para que tengáis con qué responder a los que se glorían en las apariencias no en el corazón”
— 2 Corintios 5:12
“Nada hagáis por contienda o por vanagloria; antes bien con humildad, estimando cada uno a los demás como superiores a él mismo”
— Filipenses 2:3