“Todo aquello sobre lo que cayere parte del cadáver de ellos será inmundo; el horno u hornillos se derribarán; son inmundos, por inmundos los tendréis”
— Levítico 11:35
“Para el inmundo tomarán de la ceniza de la vaca quemada de la expiación, echarán sobre ella agua corriente en un recipiente”
— Números 19:17
“Me dijo entonces: Profetiza sobre estos huesos, diles: Huesos secos, oíd palabra de Jehová”
— Ezequiel 37:4
“Me vestiste de piel carneY me tejiste con huesos nervios”
— Job 10:11
“Cercano está Jehová a los quebrantados de corazónY salva a los contritos de espíritu”
— Salmos 34:18
“Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantadoAl corazón contrito humillado no despreciarás tú, oh Dios”
— Salmos 51:17
“Él sana a los quebrantados de corazónY venda sus heridas”
— Salmos 147:3
“¿No es que partas tu pan con el hambriento, a los pobres errantes albergues en casa; que cuando veas al desnudo, lo cubras, no te escondas de tu hermano?”
— Isaías 58:7
“Mas yo haré venir sanidad para ti, sanaré tus heridas, dice Jehová; porque desechada te llamaron, diciendo: Esta es Sion, de la que nadie se acuerda”
— Jeremías 30:17
“Sus piernas, de hierro; sus pies, en parte de hierro en parte de barro cocido”
— Daniel 2:33
“Sino que contra el Señor del cielo te has ensoberbecido, hiciste traer delante de ti los vasos de su casa, tú tus grandes, tus mujeres tus concubinas, bebisteis vino en ellos; además de esto, diste alabanza a dioses de plata oro, de bronce, de hierro, de madera de piedra, que ni ven, ni oyen, ni saben; al Dios en cuya mano está tu vida, cuyos son todos tus caminos, nunca honraste”
— Daniel 5:23
“Mas ellos, cual Adán, traspasaron el pacto; allí prevaricaron contra mí”
— Oseas 6:7
“Jesús le dijo: Sígueme; deja que los muertos entierren a sus muertos”
— Mateo 8:22
“¡Ay de vosotros, escribas fariseos, hipócritas! porque sois semejantes a sepulcros blanqueados, que por fuera, a la verdad, se muestran hermosos, mas por dentro están llenos de huesos de muertos de toda inmundicia”
— Mateo 23:27
“Respondiendo Jesús, les dijo: Id, haced saber a Juan lo que habéis visto oído: los ciegos ven, los cojos andan, los leprosos son limpiados, los sordos oyen, los muertos son resucitados, a los pobres es anunciado el evangelio”
— Lucas 7:22
“Mirad mis manos mis pies, que yo mismo soy; palpad, ved; porque un espíritu no tiene carne ni huesos, como veis que yo tengo”
— Lucas 24:39
“Jesús entonces, al verla llorando, a los judíos que la acompañaban, también llorando, se estremeció en espíritu se conmovió”
— Juan 11:33
“Cuando les hubo dicho esto, les mostró las manos el costado. los discípulos se regocijaron viendo al Señor”
— Juan 20:20
“Entonces descendió Pablo se echó sobre él, abrazándole, dijo: No os alarméis, pues está vivo”
— Hechos 20:10
“¡Miserable de mí! ¿quién me librará de este cuerpo de muerte?”
— Romanos 7:24
“Así también es la resurrección de los muertos. Se siembra en corrupción, resucitará en incorrupción”
— 1 Corintios 15:42
“Por tanto, no desmayamos; antes aunque este nuestro hombre exterior se va desgastando, el interior no obstante se renueva de día en día”
— 2 Corintios 4:16
“Él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos pecados”
— Efesios 2:1
“Porque nadie aborreció jamás a su propia carne, sino que la sustenta la cuida, como también Cristo a la iglesia”
— Efesios 5:29
“A vosotros, estando muertos en pecados en la incircuncisión de vuestra carne, os dio vida juntamente con él, perdonándoos todos los pecados”
— Colosenses 2:13
“El mismo Dios de paz os santifique por completo; todo vuestro ser, espíritu, alma cuerpo, sea guardado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo”
— 1 Tesalonicenses 5:23
“Porque la palabra de Dios es viva eficaz, más cortante que toda espada de dos filos; penetra hasta partir el alma el espíritu, las coyunturas los tuétanos, discierne los pensamientos las intenciones del corazón”
— Hebreos 4:12
“Acordaos de los presos, como si estuvierais presos juntamente con ellos; de los maltratados, como que también vosotros mismos estáis en el cuerpo”
— Hebreos 13:3
“Porque como el cuerpo sin espíritu está muerto, así también la fe sin obras está muerta”
— Santiago 2:26
“Quien llevó él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros, estando muertos a los pecados, vivamos a la justicia; por cuya herida fuisteis sanados”
— 1 Pedro 2:24
“Vosotros, maridos, igualmente, vivid con ellas sabiamente, dando honor a la mujer como a vaso más frágil, como a coherederas de la gracia de la vida, para que vuestras oraciones no tengan estorbo”
— 1 Pedro 3:7
“Pero después de tres días medio entró en ellos el espíritu de vida enviado por Dios, se levantaron sobre sus pies, cayó gran temor sobre los que los vieron”
— Apocalipsis 11:11
“Para que comáis carnes de reyes de capitanes, carnes de fuertes, carnes de caballos de sus jinetes, carnes de todos, libres esclavos, pequeños grandes”
— Apocalipsis 19:18
“Después de deshecha esta mi pielEn mi carne he de ver a Dios”
— Job 19:26
“Se alegró por tanto mi corazón, se gozó mi almaMi carne también reposará confiadamente”
— Salmos 16:9
“He sido derramado como aguasY todos mis huesos se descoyuntaronMi corazón fue como ceraDerritiéndose en medio de mis entrañas”
— Salmos 22:14
“Aunque ande en valle de sombra de muerteNo temeré mal alguno, porque tú estarás conmigoTu vara tu cayado me infundirán aliento”
— Salmos 23:4
“¿Por qué te abates, oh alma míaY te turbas dentro de mí?Espera en Dios; porque aún he de alabarleSalvación mía Dios mío”
— Salmos 42:5
“Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, por su llaga fuimos nosotros curados”
— Isaías 53:5
“Mi mano hizo todas estas cosas, así todas estas cosas fueron, dice Jehová; pero miraré a aquel que es pobre humilde de espíritu, que tiembla a mi palabra”
— Isaías 66:2
“Te hice multiplicar como la hierba del campo; creciste te hiciste grande, llegaste a ser muy hermosa; tus pechos se habían formado, tu pelo había crecido; pero estabas desnuda descubierta”
— Ezequiel 16:7
“Pondré mi Espíritu en vosotros, viviréis, os haré reposar sobre vuestra tierra; sabréis que yo Jehová hablé, lo hice, dice Jehová”
— Ezequiel 37:14
“Se me turbó el espíritu a mí, Daniel, en medio de mi cuerpo, las visiones de mi cabeza me asombraron”
— Daniel 7:15
“Caerás por tanto en el día, caerá también contigo el profeta de noche; a tu madre destruiré”
— Oseas 4:5
“De la mano del Seol los redimiré, los libraré de la muerte. Oh muerte, yo seré tu muerte; seré tu destrucción, oh Seol; la compasión será escondida de mi vista”
— Oseas 13:14
“He aquí, el velo del templo se rasgó en dos, de arriba abajo; la tierra tembló, las rocas se partieron”
— Mateo 27:51
“Entonces el velo del templo se rasgó en dos, de arriba abajo”
— Marcos 15:38
“Mirad mis manos mis pies, que yo mismo soy; palpad, ved; porque un espíritu no tiene carne ni huesos, como veis que yo tengo”
— Lucas 24:39
“Pero uno de los soldados le abrió el costado con una lanza, al instante salió sangre agua”
— Juan 19:34
“Porque no dejarás mi alma en el HadesNi permitirás que tu Santo vea corrupción”
— Hechos 2:27
“Tomándole por la mano derecha le levantó; al momento se le afirmaron los pies tobillos”
— Hechos 3:7
“Si el Espíritu de aquel que levantó de los muertos a Jesús mora en vosotros, el que levantó de los muertos a Cristo Jesús vivificará también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en vosotros”
— Romanos 8:11
“Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo en vuestro espíritu, los cuales son de Dios”
— 1 Corintios 6:20
“Porque aunque fue crucificado en debilidad, vive por el poder de Dios. Pues también nosotros somos débiles en él, pero viviremos con él por el poder de Dios para con vosotros”
— 2 Corintios 13:4
“No contristéis al Espíritu Santo de Dios, con el cual fuisteis sellados para el día de la redención”
— Efesios 4:30
“Pero la que se entrega a los placeres, viviendo está muerta”
— 1 Timoteo 5:6
“Por otra parte, tuvimos a nuestros padres terrenales que nos disciplinaban, los venerábamos. ¿Por qué no obedeceremos mucho mejor al Padre de los espíritus, viviremos?”
— Hebreos 12:9
“Quien llevó él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros, estando muertos a los pecados, vivamos a la justicia; por cuya herida fuisteis sanados”
— 1 Pedro 2:24
“Vi a un ángel que estaba en pie en el sol, clamó a gran voz, diciendo a todas las aves que vuelan en medio del cielo: Venid, congregaos a la gran cena de Dios”
— Apocalipsis 19:17