46 Versículos bíblicos sobre las lágrimas

Versículos bíblicos sobre las lágrimas

“Mis huidas tú has contadoPon mis lágrimas en tu redoma¿No están ellas en tu libro?”

— Salmos 56:8

“Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron”

— Apocalipsis 21:4

“Los que sembraron con lágrimas, con regocijo segarán”

— Salmos 126:5

“Jesús lloró”

— Juan 11:35

“Claman los justos, Jehová oyeY los libra de todas sus angustiasCercano está Jehová a los quebrantados de corazónY salva a los contritos de espíritu”

— Salmos 34:17-18

“Destruirá a la muerte para siempre; enjugará Jehová el Señor toda lágrima de todos los rostros; quitará la afrenta de su pueblo de toda la tierra; porque Jehová lo ha dicho”

— Isaías 25:8

“Porque el Cordero que está en medio del trono los pastoreará, los guiará a fuentes de aguas de vida; Dios enjugará toda lágrima de los ojos de ellos”

— Apocalipsis 7:17

“Él sana a los quebrantados de corazónY venda sus heridas”

— Salmos 147:3

“Bendito sea el Dios Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de misericordias Dios de toda consolación, el cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquier tribulación, por medio de la consolación con que nosotros somos consolados por Dios”

— 2 Corintios 1:3-4

“Por la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordiasNuevas son cada mañana; grande es tu fidelidad”

— Lamentaciones 3:22-23

“Porque un momento será su iraPero su favor dura toda la vidaPor la noche durará el lloroY a la mañana vendrá la alegría”

— Salmos 30:5

“Bienaventurados los que lloran, porque ellos recibirán consolación”

— Mateo 5:4

“A proclamar el año de la buena voluntad de Jehová, el día de venganza del Dios nuestro; a consolar a todos los enlutados”

— Isaías 61:2

“Los que sembraron con lágrimas, con regocijo segarán”

— Salmos 126:5

“Vuelve, di a Ezequías, príncipe de mi pueblo: Así dice Jehová, el Dios de David tu padre: Yo he oído tu oración, he visto tus lágrimas; he aquí que yo te sano; al tercer día subirás a la casa de Jehová”

— 2 Reyes 20:5

“Ten misericordia de mí, oh Jehová, porque estoy en angustiaSe han consumido de tristeza mis ojos, mi alma también mi cuerpo”

— Salmos 31:9

“Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado”

— Hebreos 4:15

“Fueron mis lágrimas mi pan de día de nocheMientras me dicen todos los días: ¿Dónde está tu Dios?”

— Salmos 42:3

“Entonces la virgen se alegrará en la danza, los jóvenes los viejos juntamente; cambiaré su lloro en gozo, los consolaré, los alegraré de su dolor”

— Jeremías 31:13

“Ríos de agua descendieron de mis ojosPorque no guardaban tu ley”

— Salmos 119:136

“Echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros”

— 1 Pedro 5:7

“Se llenó de amargura mi almaY en mi corazón sentía punzadasTan torpe era yo, que no entendíaEra como una bestia delante de ti”

— Salmos 73:21-22

“Derramaré sobre la casa de David, sobre los moradores de Jerusalén, espíritu de gracia de oración; mirarán a mí, a quien traspasaron, llorarán como se llora por hijo unigénito, afligiéndose por él como quien se aflige por el primogénito”

— Zacarías 12:10

“Doy gracias a Dios, al cual sirvo desde mis mayores con limpia conciencia, de que sin cesar me acuerdo de ti en mis oraciones noche día”

— 2 Timoteo 1:3

“Dijo luego Jehová: Bien he visto la aflicción de mi pueblo que está en Egipto, he oído su clamor a causa de sus exactores; pues he conocido sus angustias”

— Éxodo 3:7

“Oye mi oración, oh Jehová, escucha mi clamorNo calles ante mis lágrimasPorque forastero soy para tiY advenedizo, como todos mis padres”

— Salmos 39:12

“Entonces Pedro se acordó de las palabras de Jesús, que le había dicho: Antes que cante el gallo, me negarás tres veces. saliendo fuera, lloró amargamente”

— Mateo 26:75

“Ríos de agua descendieron de mis ojosPorque no guardaban tu ley”

— Salmos 119:136

“De igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles”

— Romanos 8:26

“En la multitud de mis pensamientos dentro de míTus consolaciones alegraban mi alma”

— Salmos 94:19

“Desfallecieron mis ojos por tu palabraDiciendo: ¿Cuándo me consolarás?”

— Salmos 119:82

“Porque la tristeza que es según Dios produce arrepentimiento para salvación, de que no hay que arrepentirse; pero la tristeza del mundo produce muerte”

— 2 Corintios 7:10

“Se deshace mi alma de ansiedadSusténtame según tu palabra”

— Salmos 119:28

“Le dijeron: Mujer, ¿por qué lloras? Les dijo: Porque se han llevado a mi Señor, no sé dónde le han puesto”

— Juan 20:13

“Lloraba yo mucho, porque no se había hallado a ninguno digno de abrir el libro, ni de leerlo, ni de mirarlo”

— Apocalipsis 5:4

“Señor, delante de ti están todos mis deseosY mi suspiro no te es oculto”

— Salmos 38:9

“Estando detrás de él a sus pies, llorando, comenzó a regar con lágrimas sus pies, los enjugaba con sus cabellos; besaba sus pies, los ungía con el perfume”

— Lucas 7:38

“Ríos de agua descendieron de mis ojosPorque no guardaban tu ley”

— Salmos 119:136

“Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron”

— Apocalipsis 21:4

“Despreciado desechado entre los hombres, varón de dolores, experimentado en quebranto; como que escondimos de él el rostro, fue menospreciado, no lo estimamosCiertamente llevó él nuestras enfermedades, sufrió nuestros dolores; nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios abatido”

— Isaías 53:3-4

“Desfallecieron mis ojos por tu palabraDiciendo: ¿Cuándo me consolarás?”

— Salmos 119:82

“En aquel tiempo habrá un manantial abierto para la casa de David para los habitantes de Jerusalén, para la purificación del pecado de la inmundicia”

— Zacarías 13:1

“Mas ahora que ha muerto, ¿para qué he de ayunar? ¿Podré yo hacerle volver? Yo voy a él, mas él no volverá a mí”

— 2 Samuel 12:23

“Irá andando llorando el que lleva la preciosa semillaMas volverá a venir con regocijo, trayendo sus gavillas”

— Salmos 126:6

“Pero Jesús, volviéndose mirándola, dijo: Ten ánimo, hija; tu fe te ha salvado. la mujer fue salva desde aquella hora”

— Mateo 9:22

“Mucha paz tienen los que aman tu leyY no hay para ellos tropiezo”

— Salmos 119:165