“El que fuere irreprensible, marido de una sola mujer, tenga hijos creyentes que no estén acusados de disolución ni de rebeldía”
— Tito 1:6
“Palabra fiel: Si alguno anhela obispado, buena obra desea”
— 1 Timoteo 3:1
“Pero es necesario que el obispo sea irreprensible, marido de una sola mujer, sobrio, prudente, decoroso, hospedador, apto para enseñar”
— 1 Timoteo 3:2
“Porque es necesario que el obispo sea irreprensible, como administrador de Dios; no soberbio, no iracundo, no dado al vino, no pendenciero, no codicioso de ganancias deshonestas”
— Tito 1:7
“No dado al vino, no pendenciero, no codicioso de ganancias deshonestas, sino amable, apacible, no avaro”
— 1 Timoteo 3:3
“Sino hospedador, amante de lo bueno, sobrio, justo, santo, dueño de sí mismo”
— Tito 1:8
“Que gobierne bien su casa, que tenga a sus hijos en sujeción con toda honestidad”
— 1 Timoteo 3:4
“(pues el que no sabe gobernar su propia casa, ¿cómo cuidará de la iglesia de Dios?)”
— 1 Timoteo 3:5
“Retenedor de la palabra fiel tal como ha sido enseñada, para que también pueda exhortar con sana enseñanza convencer a los que contradicen”
— Tito 1:9
“No un neófito, no sea que envaneciéndose caiga en la condenación del diablo”
— 1 Timoteo 3:6
“También es necesario que tenga buen testimonio de los de afuera, para que no caiga en descrédito en lazo del diablo”
— 1 Timoteo 3:7
“Porque hay aún muchos contumaces, habladores de vanidades engañadores, mayormente los de la circuncisión”
— Tito 1:10
“Los diáconos asimismo deben ser honestos, sin doblez, no dados a mucho vino, no codiciosos de ganancias deshonestas”
— 1 Timoteo 3:8
“Que guarden el misterio de la fe con limpia conciencia”
— 1 Timoteo 3:9
“A los cuales es preciso tapar la boca; que trastornan casas enteras, enseñando por ganancia deshonesta lo que no conviene”
— Tito 1:11
“Estos también sean sometidos a prueba primero, entonces ejerzan el diaconado, si son irreprensibles”
— 1 Timoteo 3:10
“Las mujeres asimismo sean honestas, no calumniadoras, sino sobrias, fieles en todo”
— 1 Timoteo 3:11
“Uno de ellos, su propio profeta, dijo: Los cretenses, siempre mentirosos, malas bestias, glotones ociosos”
— Tito 1:12
“Los diáconos sean maridos de una sola mujer, que gobiernen bien sus hijos sus casas”
— 1 Timoteo 3:12
“Que los ancianos sean sobrios, serios, prudentes, sanos en la fe, en el amor, en la paciencia”
— Tito 2:2
“Las ancianas asimismo sean reverentes en su porte; no calumniadoras, no esclavas del vino, maestras del bien”
— Tito 2:3
“Que enseñen a las mujeres jóvenes a amar a sus maridos a sus hijos”
— Tito 2:4
“A ser prudentes, castas, cuidadosas de su casa, buenas, sujetas a sus maridos, para que la palabra de Dios no sea blasfemada”
— Tito 2:5
“Exhorta asimismo a los jóvenes a que sean prudentes”
— Tito 2:6
“Porque los que ejerzan bien el diaconado, ganan para sí un grado honroso, mucha confianza en la fe que es en Cristo Jesús”
— 1 Timoteo 3:13
“No impongas con ligereza las manos a ninguno, ni participes en pecados ajenos. Consérvate puro”
— 1 Timoteo 5:22
“Hermanos míos, no os hagáis maestros muchos de vosotros, sabiendo que recibiremos mayor condenación”
— Santiago 3:1
“Ruego a los ancianos que están entre vosotros, yo anciano también con ellos, testigo de los padecimientos de Cristo, que soy también participante de la gloria que será revelada: Apacentad la grey de Dios que está entre vosotros, cuidando de ella, no por fuerza, sino voluntariamente; no por ganancia deshonesta, sino con ánimo pronto; no como teniendo señorío sobre los que están a vuestro cuidado, sino siendo ejemplos de la grey”
— 1 Pedro 5:1-3
“Cada uno según el don que ha recibido, minístrelo a los otros, como buenos administradores de la multiforme gracia de Dios”
— 1 Pedro 4:10
“Esto te escribo, aunque tengo la esperanza de ir pronto a verte”
— 1 Timoteo 3:14
“Lo que has oído de mí ante muchos testigos, esto encarga a hombres fieles que sean idóneos para enseñar también a otros”
— 2 Timoteo 2:2
“Toda la Escritura es inspirada por Dios, útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia”
— 2 Timoteo 3:16
“Que prediques la palabra; que instes a tiempo fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia doctrina”
— 2 Timoteo 4:2
“Os rogamos, hermanos, que reconozcáis a los que trabajan entre vosotros, os presiden en el Señor, os amonestan”
— 1 Tesalonicenses 5:12
“Obedeced a vuestros pastores, sujetaos a ellos; porque ellos velan por vuestras almas, como quienes han de dar cuenta; para que lo hagan con alegría, no quejándose, porque esto no os es provechoso”
— Hebreos 13:17
“Igualmente, jóvenes, estad sujetos a los ancianos; todos, sumisos unos a otros, revestíos de humildad; porqueDios resiste a los soberbiosY da gracia a los humildes”
— 1 Pedro 5:5
“Los ancianos que gobiernan bien, sean tenidos por dignos de doble honor, mayormente los que trabajan en predicar enseñar”
— 1 Timoteo 5:17
“Sino santificad a Dios el Señor en vuestros corazones, estad siempre preparados para presentar defensa con mansedumbre reverencia ante todo el que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros”
— 1 Pedro 3:15
“Pero tú sé sobrio en todo, soporta las aflicciones, haz obra de evangelista, cumple tu ministerio”
— 2 Timoteo 4:5
“Donde no hay dirección sabia, caerá el puebloMas en la multitud de consejeros hay seguridad”
— Proverbios 11:14
“Los pensamientos son frustrados donde no hay consejoMas en la multitud de consejeros se afirman”
— Proverbios 15:22
“Porque con ingenio harás la guerraY en la multitud de consejeros está la victoria”
— Proverbios 24:6
“Sé diligente en conocer el estado de tus ovejasY mira con cuidado por tus rebañosPorque las riquezas no duran para siempre¿será la corona para perpetuas generaciones?”
— Proverbios 27:23-24
“Decid a Arquipo: Mira que cumplas el ministerio que recibiste en el Señor”
— Colosenses 4:17
“Por tanto, mirad por vosotros, por todo el rebaño en que el Espíritu Santo os ha puesto por obispos, para apacentar la iglesia del Señor, la cual él ganó por su propia sangre”
— Hechos 20:28
“Él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores maestros, a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo”
— Efesios 4:11-12
“Por esto mismo os he enviado a Timoteo, que es mi hijo amado fiel en el Señor, el cual os recordará mi proceder en Cristo, de la manera que enseño en todas partes en todas las iglesias”
— 1 Corintios 4:17