49 Versículos bíblicos sobre las armas

Versículos bíblicos sobre las armas

“Perseguiréis a vuestros enemigos, caerán a espada delante de vosotros”

— Levítico 26:7

“Que hace cesar las guerras hasta los fines de la tierraQue quiebra el arco, corta la lanzaY quema los carros en el fuego”

— Salmos 46:9

“Juzgará entre las naciones, reprenderá a muchos pueblos; volverán sus espadas en rejas de arado, sus lanzas en hoces; no alzará espada nación contra nación, ni se adiestrarán más para la guerra”

— Isaías 2:4

“Ninguna arma forjada contra ti prosperará, condenarás toda lengua que se levante contra ti en juicio. Esta es la herencia de los siervos de Jehová, su salvación de mí vendrá, dijo Jehová”

— Isaías 54:17

“Martillo me sois, armas de guerra; por medio de ti quebrantaré naciones, por medio de ti destruiré reinos”

— Jeremías 51:20

“Los moradores de las ciudades de Israel saldrán, encenderán quemarán armas, escudos, paveses, arcos saetas, dardos de mano lanzas; los quemarán en el fuego por siete años”

— Ezequiel 39:9

“Entonces Jesús le dijo: Vuelve tu espada a su lugar; porque todos los que tomen espada, a espada perecerán”

— Mateo 26:52

“Les dijo: Pues ahora, el que tiene bolsa, tómela, también la alforja; el que no tiene espada, venda su capa compre una”

— Lucas 22:36

“Respondió Jesús: Mi reino no es de este mundo; si mi reino fuera de este mundo, mis servidores pelearían para que yo no fuera entregado a los judíos; pero mi reino no es de aquí”

— Juan 18:36

“Porque es servidor de Dios para tu bien. Pero si haces lo malo, teme; porque no en vano lleva la espada, pues es servidor de Dios, vengador para castigar al que hace lo malo”

— Romanos 13:4

“Porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas”

— 2 Corintios 10:4

“Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo”

— Efesios 6:11

“Tomad el yelmo de la salvación, la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios”

— Efesios 6:17

“Entonces se manifestará aquel inicuo, a quien el Señor matará con el espíritu de su boca, destruirá con el resplandor de su venida”

— 2 Tesalonicenses 2:8

“A fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra”

— 2 Timoteo 3:17

“Porque la palabra de Dios es viva eficaz, más cortante que toda espada de dos filos; penetra hasta partir el alma el espíritu, las coyunturas los tuétanos, discierne los pensamientos las intenciones del corazón”

— Hebreos 4:12

“Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, huirá de vosotros”

— Santiago 4:7

“Sed sobrios, velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar”

— 1 Pedro 5:8

“Después hubo una gran batalla en el cielo: Miguel sus ángeles luchaban contra el dragón; luchaban el dragón sus ángeles”

— Apocalipsis 12:7

“Adoraron al dragón que había dado autoridad a la bestia, adoraron a la bestia, diciendo: ¿Quién como la bestia, quién podrá luchar contra ella?”

— Apocalipsis 13:4

“Entonces vi el cielo abierto; he aquí un caballo blanco, el que lo montaba se llamaba Fiel Verdadero, con justicia juzga pelea. Sus ojos eran como llama de fuego, había en su cabeza muchas diademas; tenía un nombre escrito que ninguno conocía sino él mismo. Estaba vestido de una ropa teñida en sangre; su nombre es: EL VERBO DE DIOS. los ejércitos celestiales, vestidos de lino finísimo, blanco limpio, le seguían en caballos blancos. De su boca sale una espada aguda, para herir con ella a las naciones, él las regirá con vara de hierro; él pisa el lagar del vino del furor de la ira del Dios Todopoderoso”

— Apocalipsis 19:11-15

“Bendito sea Jehová, mi rocaQuien adiestra mis manos para la batallaY mis dedos para la guerra”

— Salmos 144:1

“Ninguna arma forjada contra ti prosperará, condenarás toda lengua que se levante contra ti en juicio. Esta es la herencia de los siervos de Jehová, su salvación de mí vendrá, dijo Jehová”

— Isaías 54:17

“No penséis que he venido para traer paz a la tierra; no he venido para traer paz, sino espada”

— Mateo 10:34

“También le preguntaron unos soldados, diciendo: nosotros, ¿qué haremos? les dijo: No hagáis extorsión a nadie, ni calumniéis; contentaos con vuestro salario”

— Lucas 3:14

“No paguéis a nadie mal por mal; procurad lo bueno delante de todos los hombres”

— Romanos 12:17

“El amor no hace mal al prójimo; así que el cumplimiento de la ley es el amor”

— Romanos 13:10

“En palabra de verdad, en poder de Dios, con armas de justicia a diestra a siniestra”

— 2 Corintios 6:7

“Ni deis lugar al diablo”

— Efesios 4:27

“Porque no tenemos lucha contra sangre carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes”

— Efesios 6:12

“Pero ahora dejad también vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, blasfemia, palabras deshonestas de vuestra boca”

— Colosenses 3:8

“Este mandamiento, hijo Timoteo, te encargo, para que conforme a las profecías que se hicieron antes en cuanto a ti, milites por ellas la buena milicia”

— 1 Timoteo 1:18

“Tú, pues, sufre penalidades como buen soldado de Jesucristo. Ninguno que milita se enreda en los negocios de la vida, a fin de agradar a aquel que lo tomó por soldado”

— 2 Timoteo 2:3-4

“He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe”

— 2 Timoteo 4:7

“Porque nosotros también éramos en otro tiempo insensatos, rebeldes, extraviados, esclavos de concupiscencias deleites diversos, viviendo en malicia envidia, aborrecibles, aborreciéndonos unos a otros”

— Tito 3:3

“¿De dónde vienen las guerras los pleitos entre vosotros? ¿No es de vuestras pasiones, las cuales combaten en vuestros miembros?”

— Santiago 4:1

“Amados, yo os ruego como a extranjeros peregrinos, que os abstengáis de los deseos carnales que batallan contra el alma”

— 1 Pedro 2:11

“Tienen los ojos llenos de adulterio, no se sacian de pecar, seducen a las almas inconstantes, tienen el corazón habituado a la codicia, son hijos de maldición”

— 2 Pedro 2:14

“El que practica el pecado es del diablo; porque el diablo peca desde el principio. Para esto apareció el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo”

— 1 Juan 3:8

“Salió otro caballo, bermejo; al que lo montaba le fue dado poder de quitar de la tierra la paz, que se matasen unos a otros; se le dio una gran espada”

— Apocalipsis 6:4

“Pues el poder de los caballos estaba en su boca en sus colas; porque sus colas, semejantes a serpientes, tenían cabezas, con ellas dañaban”

— Apocalipsis 9:19

“Los demás fueron muertos con la espada que salía de la boca del que montaba el caballo, todas las aves se saciaron de las carnes de ellos”

— Apocalipsis 19:21

“Quien adiestra mis manos para la batallaPara entesar con mis brazos el arco de bronce”

— Salmos 18:34

“Bendito sea Jehová, mi rocaQuien adiestra mis manos para la batallaY mis dedos para la guerra”

— Salmos 144:1

“Ninguna arma forjada contra ti prosperará, condenarás toda lengua que se levante contra ti en juicio. Esta es la herencia de los siervos de Jehová, su salvación de mí vendrá, dijo Jehová”

— Isaías 54:17

“Oiréis de guerras rumores de guerras; mirad que no os turbéis, porque es necesario que todo esto acontezca; pero aún no es el fin”

— Mateo 24:6

“A ellos dijo: Cuando os envié sin bolsa, sin alforja, sin calzado, ¿os faltó algo? Ellos dijeron: Nada”

— Lucas 22:35

“La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo”

— Juan 14:27