53 Versículos bíblicos sobre la separación familiar

Versículos bíblicos sobre la separación familiar

“No te vengarás, ni guardarás rencor a los hijos de tu pueblo, sino amarás a tu prójimo como a ti mismo. Yo Jehová”

— Levítico 19:18

“Porque he venido para poner en disensión al hombre contra su padre, a la hija contra su madre, a la nuera contra su suegra; los enemigos del hombre serán los de su casa”

— Mateo 10:35-36

“¿Pensáis que he venido para dar paz en la tierra? Os digo: No, sino disensión. Porque de aquí en adelante, cinco en una familia estarán divididos, tres contra dos, dos contra tres. Estará dividido el padre contra el hijo, el hijo contra el padre; la madre contra la hija, la hija contra la madre; la suegra contra su nuera, la nuera contra su suegra”

— Lucas 12:51-53

“Si es posible, en cuanto dependa de vosotros, estad en paz con todos los hombres”

— Romanos 12:18

“Pero si el incrédulo se separa, sepárese; pues no está el hermano o la hermana sujeto a servidumbre en semejante caso, sino que a paz nos llamó Dios”

— 1 Corintios 7:15

“Vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en disciplina amonestación del Señor”

— Efesios 6:4

“Hijos, obedeced a vuestros padres en todo, porque esto agrada al Señor”

— Colosenses 3:20

“Porque si alguno no provee para los suyos, mayormente para los de su casa, ha negado la fe, es peor que un incrédulo”

— 1 Timoteo 5:8

“Que enseñen a las mujeres jóvenes a amar a sus maridos a sus hijos”

— Tito 2:4

“Sean vuestras costumbres sin avaricia, contentos con lo que tenéis ahora; porque él dijo: No te desampararé, ni te dejaré”

— Hebreos 13:5

“¡Oh almas adúlteras! ¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios”

— Santiago 4:4

“Vosotros, maridos, igualmente, vivid con ellas sabiamente, dando honor a la mujer como a vaso más frágil, como a coherederas de la gracia de la vida, para que vuestras oraciones no tengan estorbo”

— 1 Pedro 3:7

“Pero el que tiene bienes de este mundo ve a su hermano tener necesidad, cierra contra él su corazón, ¿cómo mora el amor de Dios en él?”

— 1 Juan 3:17

“En todo tiempo ama el amigoY es como un hermano en tiempo de angustia”

— Proverbios 17:17

“El hombre que tiene amigos ha de mostrarse amigoY amigo hay más unido que un hermano”

— Proverbios 18:24

“No dejes a tu amigo, ni al amigo de tu padreNi vayas a la casa de tu hermano en el día de tu aflicciónMejor es el vecino cerca que el hermano lejos”

— Proverbios 27:10

“¡Mirad cuán bueno cuán delicioso esHabitar los hermanos juntos en armonía”

— Salmos 133:1

“Mejores son dos que uno; porque tienen mejor paga de su trabajo. Porque si cayeren, el uno levantará a su compañero; pero ¡ay del solo! que cuando cayere, no habrá segundo que lo levante. También si dos durmieren juntos, se calentarán mutuamente; mas ¿cómo se calentará uno solo? si alguno prevaleciere contra uno, dos le resistirán; cordón de tres dobleces no se rompe pronto”

— Eclesiastés 4:9-12

“¿No tenemos todos un mismo padre? ¿No nos ha creado un mismo Dios? ¿Por qué, pues, nos portamos deslealmente el uno contra el otro, profanando el pacto de nuestros padres?”

— Malaquías 2:10

“¿No es más bien el ayuno que yo escogí, desatar las ligaduras de impiedad, soltar las cargas de opresión, dejar ir libres a los quebrantados, que rompáis todo yugo?”

— Isaías 58:6

“Convertíos, hijos rebeldes, dice Jehová, porque yo soy vuestro esposo; os tomaré uno de cada ciudad, dos de cada familia, os introduciré en Sion”

— Jeremías 3:14

“El principio de la palabra de Jehová por medio de Oseas. Dijo Jehová a Oseas: Ve, tómate una mujer fornicaria, hijos de fornicación; porque la tierra fornica apartándose de Jehová”

— Oseas 1:2

“Las calles de la ciudad estarán llenas de muchachos muchachas que jugarán en ellas”

— Zacarías 8:5

“Porque el hijo deshonra al padre, la hija se levanta contra la madre, la nuera contra su suegra, los enemigos del hombre son los de su casa”

— Miqueas 7:6

“Levantándose, vino a su padre. cuando aún estaba lejos, lo vio su padre, fue movido a misericordia, corrió, se echó sobre su cuello, le besó”

— Lucas 15:20

“Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos”

— Juan 15:13

“Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo”

— Efesios 4:32

“Nada hagáis por contienda o por vanagloria; antes bien con humildad, estimando cada uno a los demás como superiores a él mismo”

— Filipenses 2:3

“Ante todo, tened entre vosotros ferviente amor; porque el amor cubrirá multitud de pecados”

— 1 Pedro 4:8

“Pero acerca del amor fraternal no tenéis necesidad de que os escriba, porque vosotros mismos habéis aprendido de Dios que os améis unos a otros”

— 1 Tesalonicenses 4:9

“No reprendas al anciano, sino exhórtale como a padre; a los más jóvenes, como a hermanos”

— 1 Timoteo 5:1

“Que a nadie difamen, que no sean pendencieros, sino amables, mostrando toda mansedumbre para con todos los hombres”

— Tito 3:2

“Si en verdad cumplís la ley real, conforme a la Escritura: Amarás a tu prójimo como a ti mismo, bien hacéis”

— Santiago 2:8

“Si alguno dice: Yo amo a Dios, aborrece a su hermano, es mentiroso. Pues el que no ama a su hermano a quien ha visto, ¿cómo puede amar a Dios a quien no ha visto?”

— 1 Juan 4:20

“Pero el Dios de la paciencia de la consolación os dé entre vosotros un mismo sentir según Cristo Jesús, para que unánimes, a una voz, glorifiquéis al Dios Padre de nuestro Señor Jesucristo”

— Romanos 15:5-6

“Por lo demás, hermanos, tened gozo, perfeccionaos, consolaos, sed de un mismo sentir, vivid en paz; el Dios de paz de amor estará con vosotros”

— 2 Corintios 13:11

“Así que, según tengamos oportunidad, hagamos bien a todos, mayormente a los de la familia de la fe”

— Gálatas 6:10

“Amos, haced lo que es justo recto con vuestros siervos, sabiendo que también vosotros tenéis un Amo en los cielos”

— Colosenses 4:1

“Honrad a todos. Amad a los hermanos. Temed a Dios. Honrad al rey”

— 1 Pedro 2:17

“Dios hace habitar en familia a los desamparadosSaca a los cautivos a prosperidadMas los rebeldes habitan en tierra seca”

— Salmos 68:6

“Aprended a hacer el bien; buscad el juicio, restituid al agraviado, haced justicia al huérfano, amparad a la viuda”

— Isaías 1:17

“Así ha dicho Jehová: Haced juicio justicia, librad al oprimido de mano del opresor, no engañéis ni robéis al extranjero, ni al huérfano ni a la viuda, ni derraméis sangre inocente en este lugar”

— Jeremías 22:3

“Así habló Jehová de los ejércitos, diciendo: Juzgad conforme a la verdad, haced misericordia piedad cada cual con su hermano”

— Zacarías 7:9

“Oh hombre, él te ha declarado lo que es bueno, qué pide Jehová de ti: solamente hacer justicia, amar misericordia, humillarte ante tu Dios”

— Miqueas 6:8

“Bienaventurados los pacificadores, porque ellos serán llamados hijos de Dios”

— Mateo 5:9

“Como queréis que hagan los hombres con vosotros, así también haced vosotros con ellos”

— Lucas 6:31

“Un mandamiento nuevo os doy: Que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros. En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros”

— Juan 13:34-35

“El amor no hace mal al prójimo; así que el cumplimiento de la ley es el amor”

— Romanos 13:10

“El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor; no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad. Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta”

— 1 Corintios 13:4-7

“Con toda humildad mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor”

— Efesios 4:2

“Sobre todas estas cosas vestíos de amor, que es el vínculo perfecto”

— Colosenses 3:14

“Habiendo purificado vuestras almas por la obediencia a la verdad, mediante el Espíritu, para el amor fraternal no fingido, amaos unos a otros entrañablemente, de corazón puro”

— 1 Pedro 1:22

“Ahora te ruego, señora, no como escribiéndote un nuevo mandamiento, sino el que hemos tenido desde el principio, que nos amemos unos a otros”

— 2 Juan 1:5