“Cuando Jesús hubo tomado el vinagre, dijo: Consumado es. habiendo inclinado la cabeza, entregó el espíritu”
— Juan 19:30
“Entonces Jesús, clamando a gran voz, dijo: Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu. habiendo dicho esto, expiró”
— Lucas 23:46
“Mas Jesús, habiendo otra vez clamado a gran voz, entregó el espíritu”
— Mateo 27:50
“Mas Jesús, dando una gran voz, expiró”
— Marcos 15:37
“A este, entregado por el determinado consejo anticipado conocimiento de Dios, prendisteis matasteis por manos de inicuos, crucificándole”
— Hechos 2:23
“Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros”
— Romanos 5:8
“Porque primeramente os he enseñado lo que asimismo recibí: Que Cristo murió por nuestros pecados, conforme a las Escrituras”
— 1 Corintios 15:3
“Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él”
— 2 Corintios 5:21
“Con Cristo estoy juntamente crucificado, ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó se entregó a sí mismo por mí”
— Gálatas 2:20
“En quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas de su gracia”
— Efesios 1:7
“Por medio de él reconciliar consigo todas las cosas, así las que están en la tierra como las que están en los cielos, haciendo la paz mediante la sangre de su cruz”
— Colosenses 1:20
“Porque no nos ha puesto Dios para ira, sino para alcanzar salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo, quien murió por nosotros para que ya sea que velemos, o que durmamos, vivamos juntamente con él”
— 1 Tesalonicenses 5:9-10
“El cual se dio a sí mismo en rescate por todos, de lo cual se dio testimonio a su debido tiempo”
— 1 Timoteo 2:6
“Así también Cristo fue ofrecido una sola vez para llevar los pecados de muchos; aparecerá por segunda vez, sin relación con el pecado, para salvar a los que le esperan”
— Hebreos 9:28
“En esa voluntad somos santificados mediante la ofrenda del cuerpo de Jesucristo hecha una vez para siempre”
— Hebreos 10:10
“Pero Cristo, habiendo ofrecido una vez para siempre un solo sacrificio por los pecados, se ha sentado a la diestra de Dios”
— Hebreos 10:12
“Puestos los ojos en Jesús, el autor consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, se sentó a la diestra del trono de Dios”
— Hebreos 12:2
“Quien llevó él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros, estando muertos a los pecados, vivamos a la justicia; por cuya herida fuisteis sanados”
— 1 Pedro 2:24
“Porque también Cristo padeció una sola vez por los pecados, el justo por los injustos, para llevarnos a Dios, siendo a la verdad muerto en la carne, pero vivificado en espíritu”
— 1 Pedro 3:18
“De Jesucristo el testigo fiel, el primogénito de los muertos, el soberano de los reyes de la tierra. Al que nos amó, nos lavó de nuestros pecados con su sangre”
— Apocalipsis 1:5
“Cantaban un nuevo cántico, diciendo: Digno eres de tomar el libro de abrir sus sellos; porque tú fuiste inmolado, con tu sangre nos has redimido para Dios, de todo linaje lengua pueblo nación”
— Apocalipsis 5:9
“Yo le dije: Señor, tú lo sabes. él me dijo: Estos son los que han salido de la gran tribulación, han lavado sus ropas, las han emblanquecido en la sangre del Cordero”
— Apocalipsis 7:14
“Ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero de la palabra del testimonio de ellos, menospreciaron sus vidas hasta la muerte”
— Apocalipsis 12:11
“La adoraron todos los moradores de la tierra cuyos nombres no estaban escritos en el libro de la vida del Cordero que fue inmolado desde el principio del mundo”
— Apocalipsis 13:8
“Estaba vestido de una ropa teñida en sangre; su nombre es: EL VERBO DE DIOS”
— Apocalipsis 19:13
“La muerte el Hades fueron lanzados al lago de fuego. Esta es la muerte segunda. el que no se halló inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego”
— Apocalipsis 20:14-15
“Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, por su llaga fuimos nosotros curados”
— Isaías 53:5
“Angustiado él, afligido, no abrió su boca; como cordero fue llevado al matadero; como oveja delante de sus trasquiladores, enmudeció, no abrió su boca”
— Isaías 53:7
“Con todo eso, Jehová quiso quebrantarlo, sujetándole a padecimiento. Cuando haya puesto su vida en expiación por el pecado, verá linaje, vivirá por largos días, la voluntad de Jehová será en su mano prosperada”
— Isaías 53:10
“Derramaré sobre la casa de David, sobre los moradores de Jerusalén, espíritu de gracia de oración; mirarán a mí, a quien traspasaron, llorarán como se llora por hijo unigénito, afligiéndose por él como quien se aflige por el primogénito”
— Zacarías 12:10
“Porque perros me han rodeadoMe ha cercado cuadrilla de malignosHoradaron mis manos mis pies”
— Salmos 22:16
“Repartieron entre sí mis vestidosY sobre mi ropa echaron suertes”
— Salmos 22:18
“Él guarda todos sus huesosNi uno de ellos será quebrantado”
— Salmos 34:20
“Pero Dios redimirá mi vida del poder del SeolPorque él me tomará consigo. Selah”
— Salmos 49:15
“Me pusieron además hiel por comidaY en mi sed me dieron a beber vinagre”
— Salmos 69:21
“La piedra que desecharon los edificadoresHa venido a ser cabeza del ángulo”
— Salmos 118:22
“Respóndeme pronto, oh Jehová, porque desmaya mi espírituNo escondas de mí tu rostroNo venga yo a ser semejante a los que descienden a la sepultura”
— Salmos 143:7
“Yo sé que mi Redentor viveY al fin se levantará sobre el polvo”
— Job 19:25
“Él es la propiciación por nuestros pecados; no solamente por los nuestros, sino también por los de todo el mundo”
— 1 Juan 2:2
“En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros, envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados”
— 1 Juan 4:10
“A quien Dios puso como propiciación por medio de la fe en su sangre, para manifestar su justicia, a causa de haber pasado por alto, en su paciencia, los pecados pasados”
— Romanos 3:25
“El cual fue entregado por nuestras transgresiones, resucitado para nuestra justificación”
— Romanos 4:25
“El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas?”
— Romanos 8:32
“El cual nos libró, nos libra, en quien esperamos que aún nos librará, de tan gran muerte”
— 2 Corintios 1:10
“Llevando en el cuerpo siempre por todas partes la muerte de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestros cuerpos”
— 2 Corintios 4:10
“Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición (porque está escrito: Maldito todo el que es colgado en un madero)”
— Gálatas 3:13
“Pero cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su Hijo, nacido de mujer nacido bajo la ley, para que redimiese a los que estaban bajo la ley, a fin de que recibiésemos la adopción de hijos”
— Gálatas 4:4-5
“Mediante la cruz reconciliar con Dios a ambos en un solo cuerpo, matando en ella las enemistades”
— Efesios 2:16
“Anulando el acta de los decretos que había contra nosotros, que nos era contraria, quitándola de en medio clavándola en la cruz”
— Colosenses 2:14
“Sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata, sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha sin contaminación”
— 1 Pedro 1:18-19
“Pues para esto fuisteis llamados; porque también Cristo padeció por nosotros, dejándonos ejemplo, para que sigáis sus pisadas; el cual no hizo pecado, ni se halló engaño en su boca; quien cuando le maldecían, no respondía con maldición; cuando padecía, no amenazaba, sino encomendaba la causa al que juzga justamente; quien llevó él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros, estando muertos a los pecados, vivamos a la justicia; por cuya herida fuisteis sanados”
— 1 Pedro 2:21-24
“El que vivo, estuve muerto; mas he aquí que vivo por los siglos de los siglos, amén. tengo las llaves de la muerte del Hades”
— Apocalipsis 1:18
“Por tanto, yo te aconsejo que de mí compres oro refinado en fuego, para que seas rico, vestiduras blancas para vestirte, que no se descubra la vergüenza de tu desnudez; unge tus ojos con colirio, para que veas”
— Apocalipsis 3:18
“Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron”
— Apocalipsis 21:4