79 Versículos bíblicos sobre la liberación de los malos espíritus

Versículos bíblicos sobre la liberación de los malos espíritus

“Entonces llamando a sus doce discípulos, les dio autoridad sobre los espíritus inmundos, para que los echasen fuera, para sanar toda enfermedad toda dolencia”

— Mateo 10:1

“Estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre echarán fuera demonios; hablarán nuevas lenguas”

— Marcos 16:17

“He aquí os doy potestad de hollar serpientes escorpiones, sobre toda fuerza del enemigo, nada os dañará”

— Lucas 10:19

“Aconteció que mientras íbamos a la oración, nos salió al encuentro una muchacha que tenía espíritu de adivinación, la cual daba gran ganancia a sus amos, adivinando. Esta, siguiendo a Pablo a nosotros, daba voces, diciendo: Estos hombres son siervos del Dios Altísimo, quienes os anuncian el camino de salvación. esto lo hacía por muchos días; mas desagradando a Pablo, este se volvió dijo al espíritu: Te mando en el nombre de Jesucristo, que salgas de ella. salió en aquella misma hora”

— Hechos 16:16-18

“Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, huirá de vosotros”

— Santiago 4:7

“Hijitos, vosotros sois de Dios, los habéis vencido; porque mayor es el que está en vosotros, que el que está en el mundo”

— 1 Juan 4:4

“Porque no tenemos lucha contra sangre carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes”

— Efesios 6:12

“Que tuviesen autoridad para sanar enfermedades para echar fuera demonios”

— Marcos 3:15

“Mas si por el dedo de Dios echo yo fuera los demonios, ciertamente el reino de Dios ha llegado a vosotros”

— Lucas 11:20

“Porque ¿cómo puede alguno entrar en la casa del hombre fuerte, saquear sus bienes, si primero no le ata? entonces podrá saquear su casa”

— Mateo 12:29

“Algunas mujeres que habían sido sanadas de espíritus malos de enfermedades: María, que se llamaba Magdalena, de la que habían salido siete demonios”

— Lucas 8:2

“Porque de muchos que tenían espíritus inmundos, salían estos dando grandes voces; muchos paralíticos cojos eran sanados”

— Hechos 8:7

“Porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas”

— 2 Corintios 10:4

“Ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero de la palabra del testimonio de ellos, menospreciaron sus vidas hasta la muerte”

— Apocalipsis 12:11

“A esta hija de Abraham, que Satanás había atado dieciocho años, ¿no se le debía desatar de esta ligadura en el día de reposo?”

— Lucas 13:16

“De tal manera que aun se llevaban a los enfermos los paños o delantales de su cuerpo, las enfermedades se iban de ellos, los espíritus malos salían”

— Hechos 19:12

“Reprendió Jesús al demonio, el cual salió del muchacho, este quedó sano desde aquella hora”

— Mateo 17:18

“Porque le decía: Sal de este hombre, espíritu inmundo”

— Marcos 5:8

“También salían demonios de muchos, dando voces diciendo: Tú eres el Hijo de Dios. Pero él los reprendía no les dejaba hablar, porque sabían que él era el Cristo”

— Lucas 4:41

“Sed sobrios, velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar; al cual resistid firmes en la fe, sabiendo que los mismos padecimientos se van cumpliendo en vuestros hermanos en todo el mundo”

— 1 Pedro 5:8-9

“Cuando llegó la noche, trajeron a él muchos endemoniados; con la palabra echó fuera a los demonios, sanó a todos los enfermos”

— Mateo 8:16

“Habiendo reunido a sus doce discípulos, les dio poder autoridad sobre todos los demonios, para sanar enfermedades. los envió a predicar el reino de Dios, a sanar a los enfermos”

— Lucas 9:1-2

“Pero les resistía Elimas, el mago (pues así se traduce su nombre), procurando apartar de la fe al procónsul. Entonces Saulo, que también es Pablo, lleno del Espíritu Santo, fijando en él los ojos”

— Hechos 13:8-9

“La mujer era griega, sirofenicia de nación; le rogaba que echase fuera de su hija al demonio. Pero Jesús le dijo: Deja primero que se sacien los hijos, porque no está bien tomar el pan de los hijos echarlo a los perrillos. Respondió ella le dijo: Sí, Señor; pero aun los perrillos, debajo de la mesa, comen de las migajas de los hijos. Entonces le dijo: Por esta palabra, ve; el demonio ha salido de tu hija. cuando llegó ella a su casa, halló que el demonio había salido, a la hija acostada en la cama”

— Marcos 7:26-30

“Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor de dominio propio”

— 2 Timoteo 1:7

“Él te librará del lazo del cazadorDe la peste destructora”

— Salmos 91:3

“Claman los justos, Jehová oyeY los libra de todas sus angustias”

— Salmos 34:17

“Ninguna arma forjada contra ti prosperará, condenarás toda lengua que se levante contra ti en juicio. Esta es la herencia de los siervos de Jehová, su salvación de mí vendrá, dijo Jehová”

— Isaías 54:17

“Pues yo pasaré aquella noche por la tierra de Egipto, heriré a todo primogénito en la tierra de Egipto, así de los hombres como de las bestias; ejecutaré mis juicios en todos los dioses de Egipto. Yo Jehová”

— Éxodo 12:12

“Quitará Jehová de ti toda enfermedad; todas las malas plagas de Egipto, que tú conoces, no las pondrá sobre ti, antes las pondrá sobre todos los que te aborrecieren”

— Deuteronomio 7:15

“El hombre o la mujer que evocare espíritus de muertos o se entregare a la adivinación, ha de morir; serán apedreados; su sangre será sobre ellos”

— Levítico 20:27

“Reposará sobre él el Espíritu de Jehová; espíritu de sabiduría de inteligencia, espíritu de consejo de poder, espíritu de conocimiento de temor de Jehová”

— Isaías 11:2

“El ángel de Jehová acampa alrededor de los que le temenY los defiende”

— Salmos 34:7

“Entonces clamaron a Jehová en su angustiaY los libró de sus aflicciones”

— Salmos 107:6

“Pues a sus ángeles mandará acerca de tiQue te guarden en todos tus caminos”

— Salmos 91:11

“Antes del quebrantamiento es la soberbiaY antes de la caída la altivez de espíritu”

— Proverbios 16:18

“Dijo Jehová a Satanás: Jehová te reprenda, oh Satanás; Jehová que ha escogido a Jerusalén te reprenda. ¿No es este un tizón arrebatado del incendio?”

— Zacarías 3:2

“Fue lanzado fuera el gran dragón, la serpiente antigua, que se llama diablo Satanás, el cual engaña al mundo entero; fue arrojado a la tierra, sus ángeles fueron arrojados con él”

— Apocalipsis 12:9

“Se difundió su fama por toda Siria; le trajeron todos los que tenían dolencias, los afligidos por diversas enfermedades tormentos, los endemoniados, lunáticos paralíticos; los sanó”

— Mateo 4:24

“Algunas mujeres que habían sido sanadas de espíritus malos de enfermedades: María, que se llamaba Magdalena, de la que habían salido siete demonios”

— Lucas 8:2

“Aun de las ciudades vecinas muchos venían a Jerusalén, trayendo enfermos atormentados de espíritus inmundos; todos eran sanados”

— Hechos 5:16

“Cuando el espíritu inmundo sale del hombre, anda por lugares secos, buscando reposo, no lo halla. Entonces dice: Volveré a mi casa de donde salí; cuando llega, la halla desocupada, barrida adornada. Entonces va, toma consigo otros siete espíritus peores que él, entrados, moran allí; el postrer estado de aquel hombre viene a ser peor que el primero. Así también acontecerá a esta mala generación”

— Mateo 12:43-45

“Sanó a muchos que estaban enfermos de diversas enfermedades, echó fuera muchos demonios; no dejaba hablar a los demonios, porque le conocían”

— Marcos 1:34

“Algunas mujeres que habían sido sanadas de espíritus malos de enfermedades: María, que se llamaba Magdalena, de la que habían salido siete demonios, Juana, mujer de Chuza intendente de Herodes, Susana, otras muchas que le servían de sus bienes”

— Lucas 8:2-3

“No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿qué comunión la luz con las tinieblas? ¿qué concordia Cristo con Belial? ¿O qué parte el creyente con el incrédulo? ¿qué acuerdo hay entre el templo de Dios los ídolos? Porque vosotros sois el templo del Dios viviente, como Dios dijoHabitaré andaré entre ellosY seré su DiosY ellos serán mi puebloPor lo cualSalid de en medio de ellos, apartaos, dice el SeñorY no toquéis lo inmundoY yo os recibiré”

— 2 Corintios 6:14-17

“Antes digo que lo que los gentiles sacrifican, a los demonios lo sacrifican, no a Dios; no quiero que vosotros os hagáis partícipes con los demonios. No podéis beber la copa del Señor, la copa de los demonios; no podéis participar de la mesa del Señor, de la mesa de los demonios”

— 1 Corintios 10:20-21

“Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, huirá de vosotros”

— Santiago 4:7

“Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo”

— Efesios 6:11

“Aunque ande en valle de sombra de muerteNo temeré mal alguno, porque tú estarás conmigoTu vara tu cayado me infundirán aliento”

— Salmos 23:4

“Pero los cobardes incrédulos, los abominables homicidas, los fornicarios hechiceros, los idólatras todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego azufre, que es la muerte segunda”

— Apocalipsis 21:8

“Anda, pueblo mío, entra en tus aposentos, cierra tras ti tus puertas; escóndete un poquito, por un momento, en tanto que pasa la indignación”

— Isaías 26:20

“Por cuanto en mí ha puesto su amor, yo también lo libraréLe pondré en alto, por cuanto ha conocido mi nombreMe invocará, yo le responderéCon él estaré yo en la angustiaLo libraré le glorificaréLo saciaré de larga vidaY le mostraré mi salvación”

— Salmos 91:14-16

“La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo”

— Juan 14:27

“Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó. Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro”

— Romanos 8:37-39

“Para que Satanás no gane ventaja alguna sobre nosotros; pues no ignoramos sus maquinaciones”

— 2 Corintios 2:11

“Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores a doctrinas de demonios”

— 1 Timoteo 4:1

“Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición (porque está escrito: Maldito todo el que es colgado en un madero)”

— Gálatas 3:13

“Despojando a los principados a las potestades, los exhibió públicamente, triunfando sobre ellos en la cruz”

— Colosenses 2:15

“Jesús se acercó les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo en la tierra”

— Mateo 28:18

“El Espíritu del Señor está sobre míPor cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobresMe ha enviado a sanar a los quebrantados de corazónA pregonar libertad a los cautivosY vista a los ciegosA poner en libertad a los oprimidos”

— Lucas 4:18

“Para que abras sus ojos, para que se conviertan de las tinieblas a la luz, de la potestad de Satanás a Dios; para que reciban, por la fe que es en mí, perdón de pecados herencia entre los santificados”

— Hechos 26:18

“Al cual resistid firmes en la fe, sabiendo que los mismos padecimientos se van cumpliendo en vuestros hermanos en todo el mundo”

— 1 Pedro 5:9

“Así que, por cuanto los hijos participaron de carne sangre, él también participó de lo mismo, para destruir por medio de la muerte al que tenía el imperio de la muerte, esto es, al diablo”

— Hebreos 2:14

“Clamaron diciendo: ¿Qué tienes con nosotros, Jesús, Hijo de Dios? ¿Has venido acá para atormentarnos antes de tiempo?”

— Mateo 8:29

“Le preguntó: ¿Cómo te llamas? respondió diciendo: Legión me llamo; porque somos muchos”

— Marcos 5:9

“Le preguntó Jesús, diciendo: ¿Cómo te llamas? él dijo: Legión. Porque muchos demonios habían entrado en él”

— Lucas 8:30

“Los otros hombres que no fueron muertos con estas plagas, ni aun así se arrepintieron de las obras de sus manos, ni dejaron de adorar a los demonios, a las imágenes de oro, de plata, de bronce, de piedra de madera, las cuales no pueden ver, ni oír, ni andar; no se arrepintieron de sus homicidios, ni de sus hechicerías, ni de su fornicación, ni de sus hurtos”

— Apocalipsis 9:20-21

“Acercaos a Dios, él se acercará a vosotros. Pecadores, limpiad las manos; vosotros los de doble ánimo, purificad vuestros corazones”

— Santiago 4:8

“El que practica el pecado es del diablo; porque el diablo peca desde el principio. Para esto apareció el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo”

— 1 Juan 3:8

“El ángel de Jehová acampa alrededor de los que le temenY los defiende”

— Salmos 34:7

“Tú también por la sangre de tu pacto serás salva; yo he sacado tus presos de la cisterna en que no hay agua”

— Zacarías 9:11

“El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ungió Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, a los presos apertura de la cárcel”

— Isaías 61:1

“El Espíritu del Señor está sobre míPor cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobresMe ha enviado a sanar a los quebrantados de corazónA pregonar libertad a los cautivosY vista a los ciegosA poner en libertad a los oprimidos”

— Lucas 4:18

“Cómo Dios ungió con el Espíritu Santo con poder a Jesús de Nazaret, cómo este anduvo haciendo bienes sanando a todos los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él”

— Hechos 10:38

“Porque ¿cómo puede alguno entrar en la casa del hombre fuerte, saquear sus bienes, si primero no le ata? entonces podrá saquear su casa”

— Mateo 12:29

“No temas en nada lo que vas a padecer. He aquí, el diablo echará a algunos de vosotros en la cárcel, para que seáis probados, tendréis tribulación por diez días. Sé fiel hasta la muerte, yo te daré la corona de la vida”

— Apocalipsis 2:10

“Pero de aquel día de la hora nadie sabe, ni aun los ángeles que están en el cielo, ni el Hijo, sino el Padre”

— Marcos 13:32

“Mas gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo”

— 1 Corintios 15:57

“Pues no habéis recibido el espíritu de esclavitud para estar otra vez en temor, sino que habéis recibido el espíritu de adopción, por el cual clamamos: ¡Abba, Padre”

— Romanos 8:15