49 Versículos bíblicos sobre la imperfección

Versículos bíblicos sobre la imperfección

“Por cuanto todos pecaron, están destituidos de la gloria de Dios”

— Romanos 3:23

“Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, la verdad no está en nosotros”

— 1 Juan 1:8

“Ciertamente no hay hombre justo en la tierra, que haga el bien nunca peque”

— Eclesiastés 7:20

“Porque todos ofendemos muchas veces. Si alguno no ofende en palabra, este es varón perfecto, capaz también de refrenar todo el cuerpo”

— Santiago 3:2

“He aquí, en maldad he sido formadoY en pecado me concibió mi madre”

— Salmos 51:5

“Yo sé que en mí, esto es, en mi carne, no mora el bien; porque el querer el bien está en mí, pero no el hacerlo”

— Romanos 7:18

“Si bien todos nosotros somos como suciedad, todas nuestras justicias como trapo de inmundicia; caímos todos nosotros como la hoja, nuestras maldades nos llevaron como viento”

— Isaías 64:6

“¿Quién podrá decir: Yo he limpiado mi corazónLimpio estoy de mi pecado?”

— Proverbios 20:9

“Me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo”

— 2 Corintios 12:9

“No entres en juicio con tu siervoPorque no se justificará delante de ti ningún ser humano”

— Salmos 143:2

“¿Qué cosa es el hombre para que sea limpioY para que se justifique el nacido de mujer?”

— Job 15:14

“Engañoso es el corazón más que todas las cosas, perverso; ¿quién lo conocerá?”

— Jeremías 17:9

“Mas la Escritura lo encerró todo bajo pecado, para que la promesa que es por la fe en Jesucristo fuese dada a los creyentes”

— Gálatas 3:22

“Porque él conoce nuestra condiciónSe acuerda de que somos polvo”

— Salmos 103:14

“Si decimos que no hemos pecado, le hacemos a él mentiroso, su palabra no está en nosotros”

— 1 Juan 1:10

“El pensamiento del necio es pecadoY abominación a los hombres el escarnecedor”

— Proverbios 24:9

“Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron”

— Romanos 5:12

“Él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos pecados, en los cuales anduvisteis en otro tiempo, siguiendo la corriente de este mundo, conforme al príncipe de la potestad del aire, el espíritu que ahora opera en los hijos de desobediencia, entre los cuales también todos nosotros vivimos en otro tiempo en los deseos de nuestra carne, haciendo la voluntad de la carne de los pensamientos, éramos por naturaleza hijos de ira, lo mismo que los demás”

— Efesios 2:1-3

“Palabra fiel digna de ser recibida por todos: que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores, de los cuales yo soy el primero”

— 1 Timoteo 1:15

“JAH, si mirares a los pecados¿Quién, oh Señor, podrá mantenerse?”

— Salmos 130:3

“¡Oh gente pecadora, pueblo cargado de maldad, generación de malignos, hijos depravados! Dejaron a Jehová, provocaron a ira al Santo de Israel, se volvieron atrás”

— Isaías 1:4

“Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado”

— Hebreos 4:15

“A vosotros también, que erais en otro tiempo extraños enemigos en vuestra mente, haciendo malas obras, ahora os ha reconciliado”

— Colosenses 1:21

“Mas los malos hombres los engañadores irán de mal en peor, engañando siendo engañados”

— 2 Timoteo 3:13

“El cual no hizo pecado, ni se halló engaño en su boca”

— 1 Pedro 2:22

“Todos se desviaron, a una se han corrompidoNo hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno”

— Salmos 14:3

“Porque todos ofendemos muchas veces. Si alguno no ofende en palabra, este es varón perfecto, capaz también de refrenar todo el cuerpo. He aquí nosotros ponemos freno en la boca de los caballos para que nos obedezcan, dirigimos así todo su cuerpo. Mirad también las naves; aunque tan grandes, llevadas de impetuosos vientos, son gobernadas con un muy pequeño timón por donde el que las gobierna quiere. Así también la lengua es un miembro pequeño, pero se jacta de grandes cosas. He aquí, ¡cuán grande bosque enciende un pequeño fuegoY la lengua es un fuego, un mundo de maldad. La lengua está puesta entre nuestros miembros, contamina todo el cuerpo, inflama la rueda de la creación, ella misma es inflamada por el infierno. Porque toda naturaleza de bestias, de aves, de serpientes, de seres del mar, se doma ha sido domada por la naturaleza humana; pero ningún hombre puede domar la lengua, que es un mal que no puede ser refrenado, llena de veneno mortal”

— Santiago 3:2-8

“Por cuanto los designios de la carne son enemistad contra Dios; porque no se sujetan a la ley de Dios, ni tampoco pueden”

— Romanos 8:7

“Engañoso es el corazón más que todas las cosas, perverso; ¿quién lo conocerá?”

— Jeremías 17:9

“Se apartaron los impíos desde la matrizSe descarriaron hablando mentira desde que nacieron”

— Salmos 58:3

“Si pecaren contra ti (porque no hay hombre que no peque), estuvieres airado contra ellos, los entregares delante del enemigo, para que los cautive lleve a tierra enemiga, sea lejos o cerca”

— 1 Reyes 8:46

“Porque nosotros también éramos en otro tiempo insensatos, rebeldes, extraviados, esclavos de concupiscencias deleites diversos, viviendo en malicia envidia, aborrecibles, aborreciéndonos unos a otros”

— Tito 3:3

“Manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia, idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías, envidias, homicidios, borracheras, orgías, cosas semejantes a estas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios”

— Gálatas 5:19-21

“El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor; no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad. Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta”

— 1 Corintios 13:4-7

“Si fuéremos infieles, él permanece fielÉl no puede negarse a sí mismo”

— 2 Timoteo 2:13

“AñadeY nunca más me acordaré de sus pecados transgresiones”

— Hebreos 10:17

“Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros”

— Isaías 53:6

“Jesús le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno hay bueno, sino solo Dios”

— Lucas 18:19

“Esta es la condenación: que la luz vino al mundo, los hombres amaron más las tinieblas que la luz, porque sus obras eran malas”

— Juan 3:19

“Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo”

— 1 Juan 2:16

“Hay camino que al hombre le parece derechoPero su fin es camino de muerte”

— Proverbios 14:12

“Porque del corazón salen los malos pensamientos, los homicidios, los adulterios, las fornicaciones, los hurtos, los falsos testimonios, las blasfemias”

— Mateo 15:19

“Porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo”

— 1 Pedro 1:16

“Pero los cobardes incrédulos, los abominables homicidas, los fornicarios hechiceros, los idólatras todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego azufre, que es la muerte segunda”

— Apocalipsis 21:8

“Pero él da mayor gracia. Por esto dice: Dios resiste a los soberbios, da gracia a los humildes”

— Santiago 4:6

“¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones, ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarán el reino de Dios”

— 1 Corintios 6:9-10

“En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos”

— Efesios 4:22

“De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas”

— 2 Corintios 5:17

“Todo aquel que es nacido de Dios, no practica el pecado, porque la simiente de Dios permanece en él; no puede pecar, porque es nacido de Dios”

— 1 Juan 3:9