49 Versículos bíblicos sobre la falta de vivienda

Versículos bíblicos sobre la falta de vivienda

“No rebuscarás tu viña, ni recogerás el fruto caído de tu viña; para el pobre para el extranjero lo dejarás. Yo Jehová vuestro Dios”

— Levítico 19:10

“Cuando vendimies tu viña, no rebuscarás tras de ti; será para el extranjero, para el huérfano para la viuda”

— Deuteronomio 24:21

“Defended al débil al huérfanoHaced justicia al afligido al menesteroso”

— Salmos 82:3

“El que oprime al pobre afrenta a su HacedorMas el que tiene misericordia del pobre, lo honra”

— Proverbios 14:31

“A Jehová presta el que da al pobreY el bien que ha hecho, se lo volverá a pagar”

— Proverbios 19:17

“No robes al pobre, porque es pobreNi quebrantes en la puerta al afligidoPorque Jehová juzgará la causa de ellosY despojará el alma de aquellos que los despojaren”

— Proverbios 22:22-23

“¿No es más bien el ayuno que yo escogí, desatar las ligaduras de impiedad, soltar las cargas de opresión, dejar ir libres a los quebrantados, que rompáis todo yugo? ¿No es que partas tu pan con el hambriento, a los pobres errantes albergues en casa; que cuando veas al desnudo, lo cubras, no te escondas de tu hermano?”

— Isaías 58:6-7

“Porque tuve hambre, me disteis de comer; tuve sed, me disteis de beber; fui forastero, me recogisteis; estuve desnudo, me cubristeis; enfermo, me visitasteis; en la cárcel, vinisteis a mí. Entonces los justos le responderán diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, te sustentamos, o sediento, te dimos de beber? ¿cuándo te vimos forastero, te recogimos, o desnudo, te cubrimos? ¿O cuándo te vimos enfermo, o en la cárcel, vinimos a ti? respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis”

— Mateo 25:35-40

“Respondiendo, les dijo: El que tiene dos túnicas, dé al que no tiene; el que tiene qué comer, haga lo mismo”

— Lucas 3:11

“Mas cuando hagas banquete, llama a los pobres, los mancos, los cojos los ciegos; serás bienaventurado; porque ellos no te pueden recompensar, pero te será recompensado en la resurrección de los justos”

— Lucas 14:13-14

“En todo os he enseñado que, trabajando así, se debe ayudar a los necesitados, recordar las palabras del Señor Jesús, que dijo: Más bienaventurado es dar que recibir”

— Hechos 20:35

“Compartiendo para las necesidades de los santos; practicando la hospitalidad”

— Romanos 12:13

“Como está escritoRepartió, dio a los pobresSu justicia permanece para siempre”

— 2 Corintios 9:9

“Solamente nos pidieron que nos acordásemos de los pobres; lo cual también procuré con diligencia hacer”

— Gálatas 2:10

“La religión pura sin mácula delante de Dios el Padre es esta: Visitar a los huérfanos a las viudas en sus tribulaciones, guardarse sin mancha del mundo”

— Santiago 1:27

“Si un hermano o una hermana están desnudos, tienen necesidad del mantenimiento de cada día, alguno de vosotros les dice: Id en paz, calentaos saciaos, pero no les dais las cosas que son necesarias para el cuerpo, ¿de qué aprovecha?”

— Santiago 2:15-16

“Pero el que tiene bienes de este mundo ve a su hermano tener necesidad, cierra contra él su corazón, ¿cómo mora el amor de Dios en él?”

— 1 Juan 3:17

“Padre de huérfanos defensor de viudasEs Dios en su santa morada”

— Salmos 68:5

“Aprended a hacer el bien; buscad el juicio, restituid al agraviado, haced justicia al huérfano, amparad a la viuda”

— Isaías 1:17

“Si dieres tu pan al hambriento, saciares al alma afligida, en las tinieblas nacerá tu luz, tu oscuridad será como el mediodía”

— Isaías 58:10

“Entonces les responderá diciendo: De cierto os digo que en cuanto no lo hicisteis a uno de estos más pequeños, tampoco a mí lo hicisteis”

— Mateo 25:45

“Había un hombre rico, que se vestía de púrpura de lino fino, hacía cada día banquete con esplendidez. Había también un mendigo llamado Lázaro, que estaba echado a la puerta de aquel, lleno de llagas, ansiaba saciarse de las migajas que caían de la mesa del rico; aun los perros venían le lamían las llagas. Aconteció que murió el mendigo, fue llevado por los ángeles al seno de Abraham; murió también el rico, fue sepultado. en el Hades alzó sus ojos, estando en tormentos, vio de lejos a Abraham, a Lázaro en su seno. Entonces él, dando voces, dijo: Padre Abraham, ten misericordia de mí, envía a Lázaro para que moje la punta de su dedo en agua, refresque mi lengua; porque estoy atormentado en esta llama. Pero Abraham le dijo: Hijo, acuérdate que recibiste tus bienes en tu vida, Lázaro también males; pero ahora este es consolado aquí, tú atormentado. Además de todo esto, una gran sima está puesta entre nosotros vosotros, de manera que los que quisieren pasar de aquí a vosotros, no pueden, ni de allá pasar acá. Entonces le dijo: Te ruego, pues, padre, que le envíes a la casa de mi padre, porque tengo cinco hermanos, para que les testifique, a fin de que no vengan ellos también a este lugar de tormento. Abraham le dijo: A Moisés a los profetas tienen; óiganlos. Él entonces dijo: No, padre Abraham; pero si alguno fuere a ellos de entre los muertos, se arrepentirán. Mas Abraham le dijo: Si no oyen a Moisés a los profetas, tampoco se persuadirán aunque alguno se levantare de los muertos”

— Lucas 16:19-31

“Pues si yo, el Señor el Maestro, he lavado vuestros pies, vosotros también debéis lavaros los pies los unos a los otros. Porque ejemplo os he dado, para que como yo os he hecho, vosotros también hagáis”

— Juan 13:14-15

“De hacer bien de la ayuda mutua no os olvidéis; porque de tales sacrificios se agrada Dios”

— Hebreos 13:16

“A los ricos de este siglo manda que no sean altivos, ni pongan la esperanza en las riquezas, las cuales son inciertas, sino en el Dios vivo, que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos. Que hagan bien, que sean ricos en buenas obras, dadivosos, generosos; atesorando para sí buen fundamento para lo por venir, que echen mano de la vida eterna”

— 1 Timoteo 6:17-19

“Porque tú dices: Yo soy rico, me he enriquecido, de ninguna cosa tengo necesidad; no sabes que tú eres un desventurado, miserable, pobre, ciego desnudo. Por tanto, yo te aconsejo que de mí compres oro refinado en fuego, para que seas rico, vestiduras blancas para vestirte, que no se descubra la vergüenza de tu desnudez; unge tus ojos con colirio, para que veas”

— Apocalipsis 3:17-18

“Cuando tu hermano empobreciere, vendiere algo de su posesión, entonces su pariente más próximo vendrá rescatará lo que su hermano hubiere vendido”

— Levítico 25:25

“Cuando haya en medio de ti menesteroso de alguno de tus hermanos en alguna de tus ciudades, en la tierra que Jehová tu Dios te da, no endurecerás tu corazón, ni cerrarás tu mano contra tu hermano pobre, sino abrirás a él tu mano liberalmente, en efecto le prestarás lo que necesite”

— Deuteronomio 15:7-8

“Porque no faltarán menesterosos en medio de la tierra; por eso yo te mando, diciendo: Abrirás tu mano a tu hermano, al pobre al menesteroso en tu tierra”

— Deuteronomio 15:11

“Los que son de tu grey han morado en ellaPor tu bondad, oh Dios, has provisto al pobre”

— Salmos 68:10

“¿No es que partas tu pan con el hambriento, a los pobres errantes albergues en casa; que cuando veas al desnudo, lo cubras, no te escondas de tu hermano?”

— Isaías 58:7

“Pero si mejorareis cumplidamente vuestros caminos vuestras obras; si con verdad hiciereis justicia entre el hombre su prójimo, no oprimiereis al extranjero, al huérfano a la viuda, ni en este lugar derramareis la sangre inocente, ni anduviereis en pos de dioses ajenos para mal vuestro, os haré morar en este lugar, en la tierra que di a vuestros padres para siempre”

— Jeremías 7:5-7

“Así habló Jehová de los ejércitos, diciendo: Juzgad conforme a la verdad, haced misericordia piedad cada cual con su hermano; no oprimáis a la viuda, al huérfano, al extranjero ni al pobre; ni ninguno piense mal en su corazón contra su hermano”

— Zacarías 7:9-10

“Oh hombre, él te ha declarado lo que es bueno, qué pide Jehová de ti: solamente hacer justicia, amar misericordia, humillarte ante tu Dios”

— Miqueas 6:8

“Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, el cuerpo más que el vestido? Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas? ¿quién de vosotros podrá, por mucho que se afane, añadir a su estatura un codo? por el vestido, ¿por qué os afanáis? Considerad los lirios del campo, cómo crecen: no trabajan ni hilan; pero os digo, que ni aun Salomón con toda su gloria se vistió así como uno de ellos. si la hierba del campo que hoy es, mañana se echa en el horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más a vosotros, hombres de poca fe? No os afanéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos? Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas. Mas buscad primeramente el reino de Dios su justicia, todas estas cosas os serán añadidasAsí que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal”

— Mateo 6:25-34

“Alzando los ojos hacia sus discípulos, decía: Bienaventurados vosotros los pobres, porque vuestro es el reino de DiosBienaventurados los que ahora tenéis hambre, porque seréis saciados. Bienaventurados los que ahora lloráis, porque reiréis”

— Lucas 6:20-21

“Dijo luego a sus discípulos: Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué comeréis; ni por el cuerpo, qué vestiréis. La vida es más que la comida, el cuerpo que el vestido”

— Lucas 12:22-23

“Porque a los pobres siempre los tendréis con vosotros, mas a mí no siempre me tendréis”

— Juan 12:8

“Así que no había entre ellos ningún necesitado; porque todos los que poseían heredades o casas, las vendían, traían el precio de lo vendido, lo ponían a los pies de los apóstoles; se repartía a cada uno según su necesidad”

— Hechos 4:34-35

“Porque Macedonia Acaya tuvieron a bien hacer una ofrenda para los pobres que hay entre los santos que están en Jerusalén”

— Romanos 15:26

“Porque no digo esto para que haya para otros holgura, para vosotros estrechez, sino para que en este tiempo, con igualdad, la abundancia vuestra supla la escasez de ellos, para que también la abundancia de ellos supla la necesidad vuestra, para que haya igualdad, como está escrito: El que recogió mucho, no tuvo más, el que poco, no tuvo menos”

— 2 Corintios 8:13-15

“Sobrellevad los unos las cargas de los otros, cumplid así la ley de Cristo”

— Gálatas 6:2

“El que hurtaba, no hurte más, sino trabaje, haciendo con sus manos lo que es bueno, para que tenga qué compartir con el que padece necesidad”

— Efesios 4:28

“No mirando cada uno por lo suyo propio, sino cada cual también por lo de los otros”

— Filipenses 2:4

“Donde no hay griego ni judío, circuncisión ni incircuncisión, bárbaro ni escita, siervo ni libre, sino que Cristo es el todo, en todos”

— Colosenses 3:11

“Porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe, fueron traspasados de muchos dolores”

— 1 Timoteo 6:10

“Hermanos míos, ¿de qué aprovechará si alguno dice que tiene fe, no tiene obras? ¿Podrá la fe salvarle? si un hermano o una hermana están desnudos, tienen necesidad del mantenimiento de cada día, alguno de vosotros les dice: Id en paz, calentaos saciaos, pero no les dais las cosas que son necesarias para el cuerpo, ¿de qué aprovecha? Así también la fe, si no tiene obras, es muerta en sí misma”

— Santiago 2:14-17

“Pero el que tiene bienes de este mundo ve a su hermano tener necesidad, cierra contra él su corazón, ¿cómo mora el amor de Dios en él?”

— 1 Juan 3:17

“Pero los cobardes incrédulos, los abominables homicidas, los fornicarios hechiceros, los idólatras todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego azufre, que es la muerte segunda”

— Apocalipsis 21:8