“Ya no os llamaré siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero os he llamado amigos, porque todas las cosas que oí de mi Padre, os las he dado a conocer”
— Juan 15:15
“Se cumplió la Escritura que dice: Abraham creyó a Dios, le fue contado por justicia, fue llamado amigo de Dios”
— Santiago 2:23
“He aquí, yo estoy a la puerta llamo; si alguno oye mi voz abre la puerta, entraré a él, cenaré con él, él conmigo”
— Apocalipsis 3:20
“Venid a mí todos los que estáis trabajados cargados, yo os haré descansar. Llevad mi yugo sobre vosotros, aprended de mí, que soy manso humilde de corazón; hallaréis descanso para vuestras almas; porque mi yugo es fácil, ligera mi carga”
— Mateo 11:28-30
“Mis ovejas oyen mi voz, yo las conozco, me siguen”
— Juan 10:27
“La comunión íntima de Jehová es con los que le temenY a ellos hará conocer su pacto”
— Salmos 25:14
“El hombre que tiene amigos ha de mostrarse amigoY amigo hay más unido que un hermano”
— Proverbios 18:24
“Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos”
— Juan 15:13
“No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia”
— Isaías 41:10
“Enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén”
— Mateo 28:20
“Mas os digo, amigos míos: No temáis a los que matan el cuerpo, después nada más pueden hacer. Pero os enseñaré a quién debéis temer: Temed a aquel que después de haber quitado la vida, tiene poder de echar en el infierno; sí, os digo, a este temed”
— Lucas 12:4-5
“Gustad, ved que es bueno JehováDichoso el hombre que confía en él”
— Salmos 34:8
“El que tiene mis mandamientos, los guarda, ese es el que me ama; el que me ama, será amado por mi Padre, yo le amaré, me manifestaré a él”
— Juan 14:21
“Nosotros le amamos a él, porque él nos amó primero”
— 1 Juan 4:19
“Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro”
— Romanos 8:38-39
“Mas tú, Señor, Dios misericordioso clementeLento para la ira, grande en misericordia verdad”
— Salmos 86:15
“Como el Padre me ha amado, así también yo os he amado; permaneced en mi amor”
— Juan 15:9
“Así que, somos embajadores en nombre de Cristo, como si Dios rogase por medio de nosotros; os rogamos en nombre de Cristo: Reconciliaos con Dios”
— 2 Corintios 5:20
“Con Cristo estoy juntamente crucificado, ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó se entregó a sí mismo por mí”
— Gálatas 2:20
“Todo lo puedo en Cristo que me fortalece”
— Filipenses 4:13
“Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia hallar gracia para el oportuno socorro”
— Hebreos 4:16
“Echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros”
— 1 Pedro 5:7
“¿A dónde me iré de tu Espíritu?¿a dónde huiré de tu presencia?Si subiere a los cielos, allí estás túsi en el Seol hiciere mi estrado, he aquí, allí tú estásSi tomare las alas del albaY habitare en el extremo del marAun allí me guiará tu manoY me asirá tu diestra”
— Salmos 139:7-10
“Mas buscad primeramente el reino de Dios su justicia, todas estas cosas os serán añadidas”
— Mateo 6:33
“La paz de Dios gobierne en vuestros corazones, a la que asimismo fuisteis llamados en un solo cuerpo; sed agradecidos”
— Colosenses 3:15
“Pero el Señor estuvo a mi lado, me dio fuerzas, para que por mí fuese cumplida la predicación, que todos los gentiles oyesen. Así fui librado de la boca del león”
— 2 Timoteo 4:17
“Mirad cuál amor nos ha dado el Padre, para que seamos llamados hijos de Dios; por esto el mundo no nos conoce, porque no le conoció a él”
— 1 Juan 3:1
“Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros”
— Romanos 5:8
“Acercaos a Dios, él se acercará a vosotros. Pecadores, limpiad las manos; vosotros los de doble ánimo, purificad vuestros corazones”
— Santiago 4:8
“Como el ciervo brama por las corrientes de las aguasAsí clama por ti, oh Dios, el alma mía”
— Salmos 42:1
“Entonces me invocaréis, vendréis oraréis a mí, yo os oiré; me buscaréis me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón”
— Jeremías 29:12-13
“Pero si andamos en luz, como él está en luz, tenemos comunión unos con otros, la sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado”
— 1 Juan 1:7
“Pedid, se os dará; buscad, hallaréis; llamad, se os abrirá. Porque todo aquel que pide, recibe; el que busca, halla; al que llama, se le abrirá”
— Mateo 7:7-8
“Esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, a Jesucristo, a quien has enviado”
— Juan 17:3
“Fiel es Dios, por el cual fuisteis llamados a la comunión con su Hijo Jesucristo nuestro Señor”
— 1 Corintios 1:9
“Oí una gran voz del cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, él morará con ellos; ellos serán su pueblo, Dios mismo estará con ellos como su Dios”
— Apocalipsis 21:3
“Me mostrarás la senda de la vidaEn tu presencia hay plenitud de gozoDelicias a tu diestra para siempre”
— Salmos 16:11
“La gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios, la comunión del Espíritu Santo sean con todos vosotros. Amén”
— 2 Corintios 13:14
“Jesús le dijo: Yo soy el camino, la verdad, la vida; nadie viene al Padre, sino por mí”
— Juan 14:6
“En ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos”
— Hechos 4:12
“Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se glorí”
— Efesios 2:8-9
“El Dios de paz que resucitó de los muertos a nuestro Señor Jesucristo, el gran pastor de las ovejas, por la sangre del pacto eterno, os haga aptos en toda obra buena para que hagáis su voluntad, haciendo él en vosotros lo que es agradable delante de él por Jesucristo; al cual sea la gloria por los siglos de los siglos. Amén”
— Hebreos 13:20-21
“Por tanto, si hay alguna consolación en Cristo, si algún consuelo de amor, si alguna comunión del Espíritu, si algún afecto entrañable, si alguna misericordia, completad mi gozo, sintiendo lo mismo, teniendo el mismo amor, unánimes, sintiendo una misma cosa”
— Filipenses 2:1-2
“Por lo cual, animaos unos a otros, edificaos unos a otros, así como lo hacéis”
— 1 Tesalonicenses 5:11
“Pero cuando se manifestó la bondad de Dios nuestro Salvador, su amor para con los hombres, nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración por la renovación en el Espíritu Santo, el cual derramó en nosotros abundantemente por Jesucristo nuestro Salvador, para que justificados por su gracia, viniésemos a ser herederos conforme a la esperanza de la vida eterna”
— Tito 3:4-7
“Nosotros hemos conocido creído el amor que Dios tiene para con nosotros. Dios es amor; el que permanece en amor, permanece en Dios, Dios en él”
— 1 Juan 4:16
“Jehová es mi pastor; nada me faltaráEn lugares de delicados pastos me hará descansarJunto a aguas de reposo me pastorearáConfortará mi almaMe guiará por sendas de justicia por amor de su nombre”
— Salmos 23:1-3
“Ahora, así dice Jehová, Creador tuyo, oh Jacob, Formador tuyo, oh Israel: No temas, porque yo te redimí; te puse nombre, mío eres tú. Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; si por los ríos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti. Porque yo Jehová, Dios tuyo, el Santo de Israel, soy tu Salvador; a Egipto he dado por tu rescate, a Etiopía a Seba por ti”
— Isaías 43:1-3
“Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos las que hay en la tierra, visibles invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él para él. él es antes de todas las cosas, todas las cosas en él subsisten”
— Colosenses 1:16-17
“A quien amáis sin haberle visto, en quien creyendo, aunque ahora no lo veáis, os alegráis con gozo inefable glorioso”
— 1 Pedro 1:8
“El Espíritu la Esposa dicen: Ven. el que oye, diga: Ven. el que tiene sed, venga; el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente”
— Apocalipsis 22:17
“Todo lo que el Padre me da, vendrá a mí; al que a mí viene, no le echo fuera”
— Juan 6:37
“Por tanto, id, haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, del Hijo, del Espíritu Santo”
— Mateo 28:19
“Entonces Jesús, mirándolos, dijo: Para los hombres es imposible, mas para Dios, no; porque todas las cosas son posibles para Dios”
— Marcos 10:27
“Se decían el uno al otro: ¿No ardía nuestro corazón en nosotros, mientras nos hablaba en el camino, cuando nos abría las Escrituras?”
— Lucas 24:32
“De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, cree al que me envió, tiene vida eterna; no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida”
— Juan 5:24
“Bendito sea el Dios Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de misericordias Dios de toda consolación, el cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquier tribulación, por medio de la consolación con que nosotros somos consolados por Dios”
— 2 Corintios 1:3-4
“Mantengamos firme, sin fluctuar, la profesión de nuestra esperanza, porque fiel es el que prometió”
— Hebreos 10:23
“Estas cosas os he escrito a vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que sepáis que tenéis vida eterna, para que creáis en el nombre del Hijo de Dios”
— 1 Juan 5:13
“Que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación”
— Romanos 10:9-10
“Al que venciere, le daré que se siente conmigo en mi trono, así como yo he vencido, me he sentado con mi Padre en su trono”
— Apocalipsis 3:21
“Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente. Este es el primero grande mandamiento. el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo”
— Mateo 22:37-39
“La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo”
— Juan 14:27
“Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley”
— Gálatas 5:22-23
“Estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo”
— Filipenses 1:6
“Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor de dominio propio”
— 2 Timoteo 1:7
“Aguardando la esperanza bienaventurada la manifestación gloriosa de nuestro gran Dios Salvador Jesucristo, quien se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad purificar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras”
— Tito 2:13-14
“(porque por fe andamos, no por vista)”
— 2 Corintios 5:7
“Si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente sin reproche, le será dada”
— Santiago 1:5
“Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, así estaremos siempre con el Señor”
— 1 Tesalonicenses 4:17
“Pero fiel es el Señor, que os afirmará guardará del mal”
— 2 Tesalonicenses 3:3
“Porque los ojos del Señor están sobre los justosY sus oídos atentos a sus oracionesPero el rostro del Señor está contra aquellos que hacen el mal”
— 1 Pedro 3:12
“El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios”
— Romanos 8:16
“Todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor no para los hombres; sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia, porque a Cristo el Señor servís”
— Colosenses 3:23-24
“Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso del pecado que nos asedia, corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante, puestos los ojos en Jesús, el autor consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, se sentó a la diestra del trono de Dios”
— Hebreos 12:1-2
“Acercaos a Dios, él se acercará a vosotros. Pecadores, limpiad las manos; vosotros los de doble ánimo, purificad vuestros corazones”
— Santiago 4:8
“El que dice que permanece en él, debe andar como él anduvo”
— 1 Juan 2:6
“Ahora permanecen la fe, la esperanza el amor, estos tres; pero el mayor de ellos es el amor”
— 1 Corintios 13:13