51 Versículos bíblicos sobre el cuidado del medio ambiente

“Tomó, pues, Jehová Dios al hombre, lo puso en el huerto de Edén, para que lo labrara lo guardase”

— Génesis 2:15

“De Jehová es la tierra su plenitudEl mundo, los que en él habitan”

— Salmos 24:1

“¡Cuán innumerables son tus obras, oh JehováHiciste todas ellas con sabiduríaLa tierra está llena de tus beneficios”

— Salmos 104:24

“Tuyos son los cielos, tuya también la tierraEl mundo su plenitud, tú lo fundaste”

— Salmos 89:11

“En efecto, pregunta ahora a las bestias, ellas te enseñaránA las aves de los cielos, ellas te lo mostraránO habla a la tierra, ella te enseñaráLos peces del mar te lo declararán también¿Qué cosa de todas estas no entiendeQue la mano de Jehová la hizo?En su mano está el alma de todo vivienteY el hálito de todo el género humano”

— Job 12:7-10

“El justo cuida de la vida de su bestiaMas el corazón de los impíos es cruel”

— Proverbios 12:10

“Quien cuida la higuera comerá su frutoY el que mira por los intereses de su señor, tendrá honra”

— Proverbios 27:18

“Todo tiene su tiempo, todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora”

— Eclesiastés 3:1

“Por la mañana siembra tu semilla, a la tarde no dejes reposar tu mano; porque no sabes cuál es lo mejor, si esto o aquello, o si lo uno lo otro es igualmente bueno”

— Eclesiastés 11:6

“Se destruyó, cayó la tierra; enfermó, cayó el mundo; enfermaron los altos pueblos de la tierra. la tierra se contaminó bajo sus moradores; porque traspasaron las leyes, falsearon el derecho, quebrantaron el pacto sempiterno. Por esta causa la maldición consumió la tierra, sus moradores fueron asolados; por esta causa fueron consumidos los habitantes de la tierra, disminuyeron los hombres”

— Isaías 24:4-6

“Porque como desciende de los cielos la lluvia la nieve, no vuelve allá, sino que riega la tierra, la hace germinar producir, da semilla al que siembra, pan al que come, así será mi palabra que sale de mi boca; no volverá a mí vacía, sino que hará lo que yo quiero, será prosperada en aquello para que la envié”

— Isaías 55:10-11

“Os introduje en tierra de abundancia, para que comieseis su fruto su bien; pero entrasteis contaminasteis mi tierra, hicisteis abominable mi heredad”

— Jeremías 2:7

“Edificad casas, habitadlas; plantad huertos, comed del fruto de ellos”

— Jeremías 29:5

“Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas?”

— Mateo 6:26

“¿No se venden dos pajarillos por un cuarto? Con todo, ni uno de ellos cae a tierra sin vuestro Padre”

— Mateo 10:29

“Será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; entonces vendrá el fin”

— Mateo 24:14

“Estos son los que fueron sembrados en buena tierra: los que oyen la palabra la reciben, dan fruto a treinta, a sesenta, a ciento por uno”

— Marcos 4:20

“¿No se venden cinco pajarillos por dos cuartos? Con todo, ni uno de ellos está olvidado delante de Dios. Pues aun los cabellos de vuestra cabeza están todos contados. No temáis, pues; más valéis vosotros que muchos pajarillos”

— Lucas 12:6-7

“Él, respondiendo, les dijo: Os digo que si estos callaran, las piedras clamarían”

— Lucas 19:40

“Todas las cosas por él fueron hechas, sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho”

— Juan 1:3

“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”

— Juan 3:16

“Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios. Porque la creación fue sujetada a vanidad, no por su propia voluntad, sino por causa del que la sujetó en esperanza; porque también la creación misma será libertada de la esclavitud de corrupción, a la libertad gloriosa de los hijos de Dios. Porque sabemos que toda la creación gime a una, a una está con dolores de parto hasta ahora”

— Romanos 8:19-22

“Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios”

— 1 Corintios 10:31

“El que da semilla al que siembra, pan al que come, proveerá multiplicará vuestra sementera, aumentará los frutos de vuestra justicia”

— 2 Corintios 9:10

“En él asimismo tuvimos herencia, habiendo sido predestinados conforme al propósito del que hace todas las cosas según el designio de su voluntad”

— Efesios 1:11

“Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos las que hay en la tierra, visibles invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él para él”

— Colosenses 1:16

“Todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor no para los hombres”

— Colosenses 3:23

“Porque todo lo que Dios creó es bueno, nada es de desecharse, si se toma con acción de gracias”

— 1 Timoteo 4:4

“Toda buena dádiva todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre de las luces, en el cual no hay mudanza, ni sombra de variación”

— Santiago 1:17

“Pero la sabiduría que es de lo alto es primeramente pura, después pacífica, amable, benigna, llena de misericordia de buenos frutos, sin incertidumbre ni hipocresía. el fruto de justicia se siembra en paz para aquellos que hacen la paz”

— Santiago 3:17-18

“Sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata, sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha sin contaminación”

— 1 Pedro 1:18-19

“Finalmente, sed todos de un mismo sentir, compasivos, amándoos fraternalmente, misericordiosos, amigables”

— 1 Pedro 3:8

“Se airaron las naciones, tu ira ha venido, el tiempo de juzgar a los muertos, de dar el galardón a tus siervos los profetas, a los santos, a los que temen tu nombre, a los pequeños a los grandes, de destruir a los que destruyen la tierra”

— Apocalipsis 11:18

“He aquí yo vengo pronto, mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según sea su obra”

— Apocalipsis 22:12

“La tierra no se venderá a perpetuidad, porque la tierra mía es; pues vosotros forasteros extranjeros sois para conmigo. Por tanto, en toda la tierra de vuestra posesión otorgaréis rescate a la tierra”

— Levítico 25:23-24

“Cuando sities a alguna ciudad, peleando contra ella muchos días para tomarla, no destruirás sus árboles metiendo hacha en ellos, porque de ellos podrás comer; no los talarás, porque el árbol del campo no es hombre para venir contra ti en el sitio. Mas el árbol que sepas que no lleva fruto, podrás destruirlo talarlo, para construir baluarte contra la ciudad que te hace la guerra, hasta sojuzgarla”

— Deuteronomio 20:19-20

“Visitas la tierra, la riegasEn gran manera la enriquecesCon el río de Dios, lleno de aguasPreparas el grano de ellos, cuando así la disponesHaces que se empapen sus surcosHaces descender sus canalesLa ablandas con lluviasBendices sus renuevosTú coronas el año con tus bienesY tus nubes destilan grosuraDestilan sobre los pastizales del desiertoY los collados se ciñen de alegríaSe visten de manadas los llanosY los valles se cubren de granoDan voces de júbilo, aun cantan”

— Salmos 65:9-13

“La tierra dará su frutoNos bendecirá Dios, el Dios nuestro”

— Salmos 67:6

“Él hace producir el heno para las bestiasY la hierba para el servicio del hombreSacando el pan de la tierra”

— Salmos 104:14

“Alabad a Jehová desde la tierraLos monstruos marinos todos los abismosEl fuego el granizo, la nieve el vaporEl viento de tempestad que ejecuta su palabraLos montes todos los colladosEl árbol de fruto todos los cedrosLa bestia todo animalReptiles volátiles”

— Salmos 148:7-10

“Porque he aquí que yo crearé nuevos cielos nueva tierra; de lo primero no habrá memoria, ni más vendrá al pensamiento”

— Isaías 65:17

“Porque como los cielos nuevos la nueva tierra que yo hago permanecerán delante de mí, dice Jehová, así permanecerá vuestra descendencia vuestro nombre”

— Isaías 66:22

“Vosotros sois la sal de la tierra; pero si la sal se desvaneciere, ¿con qué será salada? No sirve más para nada, sino para ser echada fuera hollada por los hombresVosotros sois la luz del mundo; una ciudad asentada sobre un monte no se puede esconder. Ni se enciende una luz se pone debajo de un almud, sino sobre el candelero, alumbra a todos los que están en casa. Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos”

— Mateo 5:13-16

“Por tanto, id, haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, del Hijo, del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén”

— Mateo 28:19-20

“Les dijo: Id por todo el mundo predicad el evangelio a toda criatura”

— Marcos 16:15

“Entonces el Señor le respondió dijo: Hipócrita, cada uno de vosotros ¿no desata en el día de reposo su buey o su asno del pesebre lo lleva a beber?”

— Lucas 13:15

“Él, respondiendo, les dijo: Os digo que si estos callaran, las piedras clamarían”

— Lucas 19:40

“Ahora, Señor, mira sus amenazas, concede a tus siervos que con todo denuedo hablen tu palabra, mientras extiendes tu mano para que se hagan sanidades señales prodigios mediante el nombre de tu santo Hijo Jesús”

— Hechos 4:29-30

“Porque también la creación misma será libertada de la esclavitud de corrupción, a la libertad gloriosa de los hijos de Dios”

— Romanos 8:21

“Pero nosotros esperamos, según sus promesas, cielos nuevos tierra nueva, en los cuales mora la justicia”

— 2 Pedro 3:13

“Se airaron las naciones, tu ira ha venido, el tiempo de juzgar a los muertos, de dar el galardón a tus siervos los profetas, a los santos, a los que temen tu nombre, a los pequeños a los grandes, de destruir a los que destruyen la tierra”

— Apocalipsis 11:18