“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”
— Juan 3:16
“Que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo”
— Romanos 10:9
“Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se glorí”
— Efesios 2:8-9
“Nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración por la renovación en el Espíritu Santo”
— Tito 3:5
“Ellos dijeron: Cree en el Señor Jesucristo, serás salvo, tú tu casa”
— Hechos 16:31
“En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros, envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados”
— 1 Juan 4:10
“Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros”
— Romanos 5:8
“El cual quiere que todos los hombres sean salvos vengan al conocimiento de la verdad”
— 1 Timoteo 2:4
“De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, cree al que me envió, tiene vida eterna; no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida”
— Juan 5:24
“Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él”
— 2 Corintios 5:21
“Así también Cristo fue ofrecido una sola vez para llevar los pecados de muchos; aparecerá por segunda vez, sin relación con el pecado, para salvar a los que le esperan”
— Hebreos 9:28
“Bendito el Dios Padre de nuestro Señor Jesucristo, que según su grande misericordia nos hizo renacer para una esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los muertos”
— 1 Pedro 1:3
“Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron”
— Apocalipsis 21:4
“Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, por su llaga fuimos nosotros curados”
— Isaías 53:5
“Porque no nos ha puesto Dios para ira, sino para alcanzar salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo”
— 1 Tesalonicenses 5:9
“Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu”
— Romanos 8:1
“El cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, trasladado al reino de su amado Hijo, en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados”
— Colosenses 1:13-14
“Quien nos salvó llamó con llamamiento santo, no conforme a nuestras obras, sino según el propósito suyo la gracia que nos fue dada en Cristo Jesús antes de los tiempos de los siglos”
— 2 Timoteo 1:9
“Con Cristo estoy juntamente crucificado, ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó se entregó a sí mismo por mí”
— Gálatas 2:20
“Cuanto está lejos el oriente del occidenteHizo alejar de nosotros nuestras rebeliones”
— Salmos 103:12
“Deje el impío su camino, el hombre inicuo sus pensamientos, vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él misericordia, al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar”
— Isaías 55:7
“Este es el testimonio: que Dios nos ha dado vida eterna; esta vida está en su Hijo. El que tiene al Hijo, tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios no tiene la vida”
— 1 Juan 5:11-12
“Por tanto, id, haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, del Hijo, del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén”
— Mateo 28:19-20
“Les dijo: Id por todo el mundo predicad el evangelio a toda criatura. El que creyere fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado”
— Marcos 16:15-16
“Porque el Hijo del Hombre vino a buscar a salvar lo que se había perdido”
— Lucas 19:10
“Todo lo que el Padre me da, vendrá a mí; al que a mí viene, no le echo fuera”
— Juan 6:37
“Jesús le dijo: Yo soy el camino, la verdad, la vida; nadie viene al Padre, sino por mí”
— Juan 14:6
“En ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos”
— Hechos 4:12
“Él es la propiciación por nuestros pecados; no solamente por los nuestros, sino también por los de todo el mundo”
— 1 Juan 2:2
“Quien llevó él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros, estando muertos a los pecados, vivamos a la justicia; por cuya herida fuisteis sanados”
— 1 Pedro 2:24
“A aquel que es poderoso para guardaros sin caída, presentaros sin mancha delante de su gloria con gran alegría, al único sabio Dios, nuestro Salvador, sea gloria majestad, imperio potencia, ahora por todos los siglos. Amén”
— Judas 1:24-25
“Mas nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo”
— Filipenses 3:20
“En quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas de su gracia”
— Efesios 1:7
“Clamaban a gran voz, diciendo: La salvación pertenece a nuestro Dios que está sentado en el trono, al Cordero”
— Apocalipsis 7:10
“Bienaventurado aquel cuya transgresión ha sido perdonada, cubierto su pecadoBienaventurado el hombre a quien Jehová no culpa de iniquidadY en cuyo espíritu no hay engaño”
— Salmos 32:1-2
“He aquí Dios es salvación mía; me aseguraré no temeré; porque mi fortaleza mi canción es JAH Jehová, quien ha sido salvación para mí”
— Isaías 12:2
“Alégrate mucho, hija de Sion; da voces de júbilo, hija de Jerusalén; he aquí tu rey vendrá a ti, justo salvador, humilde, cabalgando sobre un asno, sobre un pollino hijo de asna”
— Zacarías 9:9
“Porque la gracia de Dios se ha manifestado para salvación a todos los hombres”
— Tito 2:11
“El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento”
— 2 Pedro 3:9
“Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro”
— Romanos 8:38-39
“Yo les doy vida eterna; no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano. Mi Padre que me las dio, es mayor que todos, nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre”
— Juan 10:28-29
“Por lo cual puede también salvar perpetuamente a los que por él se acercan a Dios, viviendo siempre para interceder por ellos”
— Hebreos 7:25
“Entrad por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta, espacioso el camino que lleva a la perdición, muchos son los que entran por ella; porque estrecha es la puerta, angosto el camino que lleva a la vida, pocos son los que la hallan”
— Mateo 7:13-14
“Porque tú, Señor, eres bueno perdonadorY grande en misericordia para con todos los que te invocan”
— Salmos 86:5
“Por cuanto todos pecaron, están destituidos de la gloria de Dios”
— Romanos 3:23
“Si confesamos nuestros pecados, él es fiel justo para perdonar nuestros pecados, limpiarnos de toda maldad”
— 1 Juan 1:9
“El cual nos libró, nos libra, en quien esperamos que aún nos librará, de tan gran muerte”
— 2 Corintios 1:10