32 Versículos bíblicos sobre bailar para el Señor

“Alaben su nombre con danzaCon pandero arpa a él canten”

— Salmos 149:3

“Alabadle con pandero danzaAlabadle con cuerdas flautas”

— Salmos 150:4

“David danzaba con toda su fuerza delante de Jehová; estaba David vestido con un efod de lino”

— 2 Samuel 6:14

“Cuando el arca de Jehová llegó a la ciudad de David, aconteció que Mical hija de Saúl miró desde una ventana, vio al rey David que saltaba danzaba delante de Jehová; le menospreció en su corazón”

— 2 Samuel 6:16

“Los ríos batan las manosLos montes todos hagan regocijo”

— Salmos 98:8

“Tiempo de llorar, tiempo de reír; tiempo de endechar, tiempo de bailar”

— Eclesiastés 3:4

“Has cambiado mi lamento en baileDesataste mi cilicio, me ceñiste de alegría”

— Salmos 30:11

“Porque con alegría saldréis, con paz seréis vueltos; los montes los collados levantarán canción delante de vosotros, todos los árboles del campo darán palmadas de aplauso”

— Isaías 55:12

“Bien que fuisteis echados entre los tiestosSeréis como alas de paloma cubiertas de plataY sus plumas con amarillez de oro”

— Salmos 68:13

“Porque Jehová tiene contentamiento en su puebloHermoseará a los humildes con la salvación”

— Salmos 149:4

“María la profetisa, hermana de Aarón, tomó un pandero en su mano, todas las mujeres salieron en pos de ella con panderos danzas”

— Éxodo 15:20

“Entonces mandó Ezequías sacrificar el holocausto en el altar; cuando comenzó el holocausto, comenzó también el cántico de Jehová, con las trompetas los instrumentos de David rey de Israel”

— 2 Crónicas 29:27

“David danzaba con toda su fuerza delante de Jehová; estaba David vestido con un efod de lino”

— 2 Samuel 6:14

“Porque mejor es tu misericordia que la vidaMis labios te alabaránAsí te bendeciré en mi vidaEn tu nombre alzaré mis manos”

— Salmos 63:3-4

“Deseará el rey tu hermosuraE inclínate a él, porque él es tu señor”

— Salmos 45:11

“Alabad a JAHPorque es bueno cantar salmos a nuestro DiosPorque suave hermosa es la alabanza”

— Salmos 147:1

“Entonces nuestra boca se llenará de risaY nuestra lengua de alabanzaEntonces dirán entre las nacionesGrandes cosas ha hecho Jehová con estos”

— Salmos 126:2

“Bendijo entonces Esdras a Jehová, Dios grande. todo el pueblo respondió: ¡Amén! ¡Amén! alzando sus manos; se humillaron adoraron a Jehová inclinados a tierra”

— Nehemías 8:6

“Pero cuando el arca del pacto de Jehová llegó a la ciudad de David, Mical, hija de Saúl, mirando por una ventana, vio al rey David que saltaba danzaba; lo menospreció en su corazón”

— 1 Crónicas 15:29

“Regocíjense los santos por su gloriaY canten aun sobre sus camas”

— Salmos 149:5

“Exalten a Dios con sus gargantasY espadas de dos filos en sus manos”

— Salmos 149:6

“Su hijo mayor estaba en el campo; cuando vino, llegó cerca de la casa, oyó la música las danzas”

— Lucas 15:25

“Entonces volvió Jefté a Mizpa, a su casa; he aquí su hija que salía a recibirle con panderos danzas, ella era sola, su hija única; no tenía fuera de ella hijo ni hija”

— Jueces 11:34

“Sacando luego Joiada al hijo del rey, le puso la corona el testimonio, le hicieron rey ungiéndole; batiendo las manos dijeron: ¡Viva el rey”

— 2 Reyes 11:12

“María la profetisa, hermana de Aarón, tomó un pandero en su mano, todas las mujeres salieron en pos de ella con panderos danzas”

— Éxodo 15:20

“A Jehová cantaré en mi vidaA mi Dios cantaré salmos mientras viva”

— Salmos 104:33

“Jehová está en medio de ti, poderoso, él salvará; se gozará sobre ti con alegría, callará de amor, se regocijará sobre ti con cánticos”

— Sofonías 3:17

“Alaben su nombre con danzaCon pandero arpa a él canten”

— Salmos 149:3

“Para ejecutar en ellos el juicio decretadoGloria será esto para todos sus santosAleluya”

— Salmos 149:9

“Entonces la virgen se alegrará en la danza, los jóvenes los viejos juntamente; cambiaré su lloro en gozo, los consolaré, los alegraré de su dolor”

— Jeremías 31:13

“Porque Jehová tiene contentamiento en su puebloHermoseará a los humildes con la salvación”

— Salmos 149:4

“Quiero, pues, que los hombres oren en todo lugar, levantando manos santas, sin ira ni contienda”

— 1 Timoteo 2:8