61 Versículos bíblicos sobre que el mundo no es nuestro hogar

Versículos bíblicos sobre que el mundo no es nuestro hogar

“Porque no tenemos aquí ciudad permanente, sino que buscamos la por venir”

— Hebreos 13:14

“Mas nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo”

— Filipenses 3:20

“No mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas”

— 2 Corintios 4:18

“Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra”

— Colosenses 3:2

“Si fuerais del mundo, el mundo amaría lo suyo; pero porque no sois del mundo, antes yo os elegí del mundo, por eso el mundo os aborrece”

— Juan 15:19

“No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él. Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo. el mundo pasa, sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre”

— 1 Juan 2:15-17

“Aguardando la esperanza bienaventurada la manifestación gloriosa de nuestro gran Dios Salvador Jesucristo”

— Tito 2:13

“Pero el día del Señor vendrá como ladrón en la noche; en el cual los cielos pasarán con grande estruendo, los elementos ardiendo serán deshechos, la tierra las obras que en ella hay serán quemadasPuesto que todas estas cosas han de ser deshechas, ¡cómo no debéis vosotros andar en santa piadosa manera de vivir, esperando apresurándoos para la venida del día de Dios, en el cual los cielos, encendiéndose, serán deshechos, los elementos, siendo quemados, se fundirán! Pero nosotros esperamos, según sus promesas, cielos nuevos tierra nueva, en los cuales mora la justicia”

— 2 Pedro 3:10-13

“No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla el orín corrompen, donde ladrones minan hurtan; sino haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín corrompen, donde ladrones no minan ni hurtan. Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón”

— Mateo 6:19-21

“No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable perfecta”

— Romanos 12:2

“¡Oh almas adúlteras! ¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios”

— Santiago 4:4

“Si invocáis por Padre a aquel que sin acepción de personas juzga según la obra de cada uno, conducíos en temor todo el tiempo de vuestra peregrinación”

— 1 Pedro 1:17

“Sabemos que somos de Dios, el mundo entero está bajo el maligno”

— 1 Juan 5:19

“Les dijo: Mirad, guardaos de toda avaricia; porque la vida del hombre no consiste en la abundancia de los bienes que posee”

— Lucas 12:15

“Vi un cielo nuevo una tierra nueva; porque el primer cielo la primera tierra pasaron, el mar ya no existía más”

— Apocalipsis 21:1

“Forastero soy yo en la tierraNo encubras de mí tus mandamientos”

— Salmos 119:19

“Porque ciertamente hay finY tu esperanza no será cortada”

— Proverbios 23:18

“Conforme a la fe murieron todos estos sin haber recibido lo prometido, sino mirándolo de lejos, creyéndolo, saludándolo, confesando que eran extranjeros peregrinos sobre la tierra. Porque los que esto dicen, claramente dan a entender que buscan una patria; pues si hubiesen estado pensando en aquella de donde salieron, ciertamente tenían tiempo de volver. Pero anhelaban una mejor, esto es, celestial; por lo cual Dios no se avergüenza de llamarse Dios de ellos; porque les ha preparado una ciudad”

— Hebreos 11:13-16

“Los que disfrutan de este mundo, como si no lo disfrutasen; porque la apariencia de este mundo se pasa”

— 1 Corintios 7:31

“Porque Demas me ha desamparado, amando este mundo, se ha ido a Tesalónica. Crescente fue a Galacia, Tito a Dalmacia”

— 2 Timoteo 4:10

“Yo les he dado tu palabra; el mundo los aborreció, porque no son del mundo, como tampoco yo soy del mundo”

— Juan 17:14

“Amados, yo os ruego como a extranjeros peregrinos, que os abstengáis de los deseos carnales que batallan contra el alma”

— 1 Pedro 2:11

“Porque sabemos que si nuestra morada terrestre, este tabernáculo, se deshiciere, tenemos de Dios un edificio, una casa no hecha de manos, eterna, en los cielos”

— 2 Corintios 5:1

“El cual se dio a sí mismo por nuestros pecados para librarnos del presente siglo malo, conforme a la voluntad de nuestro Dios Padre”

— Gálatas 1:4

“Así que ya no sois extranjeros ni advenedizos, sino conciudadanos de los santos, miembros de la familia de Dios”

— Efesios 2:19

“Porque nada hemos traído a este mundo, sin duda nada podremos sacar”

— 1 Timoteo 6:7

“El cielo la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán”

— Mateo 24:35

“El mundo pasa, sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre”

— 1 Juan 2:17

“La religión pura sin mácula delante de Dios el Padre es esta: Visitar a los huérfanos a las viudas en sus tribulaciones, guardarse sin mancha del mundo”

— Santiago 1:27

“Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron”

— Apocalipsis 21:4

“Señor, tú nos has sido refugioDe generación en generaciónAntes que naciesen los montesY formases la tierra el mundoDesde el siglo hasta el siglo, tú eres Dios”

— Salmos 90:1-2

“Pero los impíos son como el mar en tempestad, que no puede estarse quieto, sus aguas arrojan cieno lodo. No hay paz, dijo mi Dios, para los impíos”

— Isaías 57:20-21

“Pues tengo por cierto que las aflicciones del tiempo presente no son comparables con la gloria venidera que en nosotros ha de manifestarse”

— Romanos 8:18

“El cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, trasladado al reino de su amado Hijo”

— Colosenses 1:13

“Porque esperaba la ciudad que tiene fundamentos, cuyo arquitecto constructor es Dios”

— Hebreos 11:10

“Porque para mí el vivir es Cristo, el morir es ganancia”

— Filipenses 1:21

“Pero confiamos, más quisiéramos estar ausentes del cuerpo, presentes al Señor”

— 2 Corintios 5:8

“El cielo la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán”

— Lucas 21:33

“En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros”

— Juan 14:2

“Mas el Dios de toda gracia, que nos llamó a su gloria eterna en Jesucristo, después que hayáis padecido un poco de tiempo, él mismo os perfeccione, afirme, fortalezca establezca”

— 1 Pedro 5:10

“Ninguno que milita se enreda en los negocios de la vida, a fin de agradar a aquel que lo tomó por soldado”

— 2 Timoteo 2:4

“La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con todos vosotros. Amén”

— Apocalipsis 22:21

“Amados, ahora somos hijos de Dios, aún no se ha manifestado lo que hemos de ser; pero sabemos que cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque le veremos tal como él es”

— 1 Juan 3:2

“Vosotros sois la luz del mundo; una ciudad asentada sobre un monte no se puede esconder. Ni se enciende una luz se pone debajo de un almud, sino sobre el candelero, alumbra a todos los que están en casa. Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos”

— Mateo 5:14-16

“¡Oh almas adúlteras! ¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios. ¿O pensáis que la Escritura dice en vano: El Espíritu que él ha hecho morar en nosotros nos anhela celosamente?”

— Santiago 4:4-5

“Aunque ande en valle de sombra de muerteNo temeré mal alguno, porque tú estarás conmigoTu vara tu cayado me infundirán aliento”

— Salmos 23:4

“No habrá más maldición; el trono de Dios del Cordero estará en ella, sus siervos le servirán”

— Apocalipsis 22:3

“Porque de los presos también os compadecisteis, el despojo de vuestros bienes sufristeis con gozo, sabiendo que tenéis en vosotros una mejor perdurable herencia en los cielos”

— Hebreos 10:34

“Porque de esta manera os será otorgada amplia generosa entrada en el reino eterno de nuestro Señor Salvador Jesucristo”

— 2 Pedro 1:11

“Enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén”

— Mateo 28:20

“Porque para mí el vivir es Cristo, el morir es ganancia. Mas si el vivir en la carne resulta para mí en beneficio de la obra, no sé entonces qué escoger. Porque de ambas cosas estoy puesto en estrecho, teniendo deseo de partir estar con Cristo, lo cual es muchísimo mejor”

— Filipenses 1:21-23

“Otra vez Jesús les habló, diciendo: Yo soy la luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida”

— Juan 8:12

“Si en esta vida solamente esperamos en Cristo, somos los más dignos de conmiseración de todos los hombres”

— 1 Corintios 15:19

“Si, pues, habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios. Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra. Porque habéis muerto, vuestra vida está escondida con Cristo en Dios”

— Colosenses 3:1-3

“Por lo demás, me está guardada la corona de justicia, la cual me dará el Señor, juez justo, en aquel día; no solo a mí, sino también a todos los que aman su venida”

— 2 Timoteo 4:8

“El que da testimonio de estas cosas dice: Ciertamente vengo en breve. Amén; sí, ven, Señor Jesús”

— Apocalipsis 22:20

“Porque en esperanza fuimos salvos; pero la esperanza que se ve, no es esperanza; porque lo que alguno ve, ¿a qué esperarlo?”

— Romanos 8:24

“Conozco a un hombre en Cristo, que hace catorce años (si en el cuerpo, no lo sé; si fuera del cuerpo, no lo sé; Dios lo sabe) fue arrebatado hasta el tercer cielo”

— 2 Corintios 12:2

“Mas buscad primeramente el reino de Dios su justicia, todas estas cosas os serán añadidas”

— Mateo 6:33

“Así que, recibiendo nosotros un reino inconmovible, tengamos gratitud, mediante ella sirvamos a Dios agradándole con temor reverencia”

— Hebreos 12:28

“No entrará en ella ninguna cosa inmunda, o que hace abominación mentira, sino solamente los que están inscritos en el libro de la vida del Cordero”

— Apocalipsis 21:27