Queridos amigos, aquí les comparto 53 Versículos bíblicos sobre la pérdida de peso, que creo les ayudarán a comprender este tema si están interesados. Porque aquí en todos los versículos bíblicos que he compartido hay algunos versículos que están directamente relacionados con este tema de la Biblia y he compartido algunos otros versículos que están relacionados con este tema.
Aquí podrás ver estos versículos en un estilo de coloración muy hermoso. Que puedes compartir con tus amigos y familiares tomando una captura de pantalla.
Espero que puedas aprender algo de este tema hoy. Vayamos ahora a los versículos bíblicos. Que Dios los bendiga abundantemente, gracias.
“Porque yo soy Jehová, que os hago subir de la tierra de Egipto para ser vuestro Dios: seréis, pues, santos, porque yo soy santo”
— Levítico 11:45
“¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros? Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios”
— 1 Corintios 6:19-20
“Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional”
— Romanos 12:1
“Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios”
— 1 Corintios 10:31
“Sino que golpeo mi cuerpo, y lo pongo en servidumbre, no sea que habiendo sido heraldo para otros, yo mismo venga a ser eliminado”
— 1 Corintios 9:27
“Porque el ejercicio corporal para poco es provechoso, pero la piedad para todo aprovecha, pues tiene promesa de esta vida presente, y de la venidera”
— 1 Timoteo 4:8
“Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios”
— 1 Corintios 6:20
“Si el Espíritu de aquel que levantó de los muertos a Jesús mora en vosotros, el que levantó de los muertos a Cristo Jesús vivificará también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en vosotros”
— Romanos 8:11
“Él da esfuerzo al cansado, y multiplica las fuerzas al que no tiene ningunas”
— Isaías 40:29
“Todo lo puedo en Cristo que me fortalece”
— Filipenses 4:13
“Comer mucha miel no es bueno, Ni el buscar la propia gloria es gloria”
— Proverbios 25:27
“Él respondió y dijo: Escrito está: No solo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios”
— Mateo 4:4
“Te alabaré; porque formidables, maravillosas son tus obras; Estoy maravillado, Y mi alma lo sabe muy bien”
— Salmos 139:14
“Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley”
— Gálatas 5:22-23
“No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia”
— Isaías 41:10
“Fíate de Jehová de todo tu corazón, Y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, Y él enderezará tus veredas”
— Proverbios 3:5-6
“Jesús les dijo: Yo soy el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás”
— Juan 6:35
“Me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo”
— 2 Corintios 12:9
“Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas”
— Josué 1:9
“Deléitate asimismo en Jehová, Y él te concederá las peticiones de tu corazón”
— Salmos 37:4
“Ncomienda a Jehová tu camino, Y confía en él; y él hará”
— Salmos 37:5
“Pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán”
— Isaías 40:31
“Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas; porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga”
— Mateo 11:28-30
“Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó”
— Romanos 8:37
“Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis”
— Jeremías 29:11
“Confortará mi alma; Me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre”
— Salmos 23:3
“Dios es nuestro amparo y fortaleza, Nuestro pronto auxilio en las tribulaciones”
— Salmos 46:1
“¿Por qué gastáis el dinero en lo que no es pan, y vuestro trabajo en lo que no sacia? Oídme atentamente, y comed del bien, y se deleitará vuestra alma con grosura”
— Isaías 55:2
“(porque por fe andamos, no por vista)”
— 2 Corintios 5:7
“El Dios de esperanza os llene de todo gozo y paz en el creer, para que abundéis en esperanza por el poder del Espíritu Santo”
— Romanos 15:13
“Sforzaos y cobrad ánimo; no temáis, ni tengáis miedo de ellos, porque Jehová tu Dios es el que va contigo; no te dejará, ni te desamparará”
— Deuteronomio 31:6
“Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas”
— Mateo 6:33
“Gustad, y ved que es bueno Jehová; Dichoso el hombre que confía en él”
— Salmos 34:8
“L ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia”
— Juan 10:10
“¿No es más bien el ayuno que yo escogí, desatar las ligaduras de impiedad, soltar las cargas de opresión, y dejar ir libres a los quebrantados, y que rompáis todo yugo?”
— Isaías 58:6
“Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros”
— Santiago 4:7
“Todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres”
— Colosenses 3:23
“Lámpara es a mis pies tu palabra, Y lumbrera a mi camino”
— Salmos 119:105
“Ni tampoco presentéis vuestros miembros al pecado como instrumentos de iniquidad, sino presentaos vosotros mismos a Dios como vivos de entre los muertos, y vuestros miembros a Dios como instrumentos de justicia”
— Romanos 6:13
“Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio”
— 2 Timoteo 1:7
“Ncomienda a Jehová tus obras, Y tus pensamientos serán afirmados”
— Proverbios 16:3
“L que habita al abrigo del Altísimo Morará bajo la sombra del Omnipotente. Diré yo a Jehová: Esperanza mía, y castillo mío; Mi Dios, en quien confiaré”
— Salmos 91:1-2
“Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá. Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá”
— Mateo 7:7-8
“Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; y si por los ríos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti”
— Isaías 43:2
“¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?”
— Romanos 8:31
“Jehová va delante de ti; él estará contigo, no te dejará, ni te desamparará; no temas ni te intimides”
— Deuteronomio 31:8
“Pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán”
— Isaías 40:31
“De Jehová es la tierra y su plenitud; El mundo, y los que en él habitan”
— Salmos 24:1
“Jesús les dijo: Por vuestra poca fe; porque de cierto os digo, que si tuviereis fe como un grano de mostaza, diréis a este monte: Pásate de aquí allá, y se pasará; y nada os será imposible”
— Mateo 17:20
“Por tanto, os digo que todo lo que pidiereis orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá”
— Marcos 11:24
“La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo”
— Juan 14:27
“Ninguna arma forjada contra ti prosperará, y condenarás toda lengua que se levante contra ti en juicio. Esta es la herencia de los siervos de Jehová, y su salvación de mí vendrá, dijo Jehová”
— Isaías 54:17
“Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús”
— Filipenses 4:6-7