46 Versículos bíblicos sobre los labios

Versículos bíblicos sobre los labios

Queridos amigos, aquí les comparto 46 Versículos bíblicos sobre los labios, que creo les ayudarán a comprender este tema si están interesados. Porque aquí en todos los versículos bíblicos que he compartido hay algunos versículos que están directamente relacionados con este tema de la Biblia y he compartido algunos otros versículos que están relacionados con este tema.

Aquí podrás ver estos versículos en un estilo de coloración muy hermoso. Que puedes compartir con tus amigos y familiares tomando una captura de pantalla.

Espero que puedas aprender algo de este tema hoy. Vayamos ahora a los versículos bíblicos. Que Dios los bendiga abundantemente, gracias.

“No andarás chismeando entre tu pueblo. No atentarás contra la vida de tu prójimo. Yo Jehová”

— Levítico 19:16

“La blanda respuesta quita la ira; Mas la palabra áspera hace subir el furor”

— Proverbios 15:1

“Porque todos ofendemos muchas veces. Si alguno no ofende en palabra, este es varón perfecto, capaz también de refrenar todo el cuerpo”

— Santiago 3:2

“Guarda tu lengua del mal, Y tus labios de hablar engaño”

— Salmos 34:13

“N las muchas palabras no falta pecado; Mas el que refrena sus labios es prudente”

— Proverbios 10:19

“Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes”

— Efesios 4:29

“Sea vuestra palabra siempre con gracia, sazonada con sal, para que sepáis cómo debéis responder a cada uno”

— Colosenses 4:6

“La muerte y la vida están en poder de la lengua, Y el que la ama comerá de sus frutos”

— Proverbios 18:21

“¡Generación de víboras! ¿Cómo podéis hablar lo bueno, siendo malos? Porque de la abundancia del corazón habla la boca”

— Mateo 12:34

“Pon guarda a mi boca, oh Jehová; Guarda la puerta de mis labios”

— Salmos 141:3

“L que guarda su boca guarda su alma; Mas el que mucho abre sus labios tendrá calamidad”

— Proverbios 13:3

“Si alguno se cree religioso entre vosotros, y no refrena su lengua, sino que engaña su corazón, la religión del tal es vana”

— Santiago 1:26

“L que guarda su boca y su lengua, Su alma guarda de angustias”

— Proverbios 21:23

“Sean gratos los dichos de mi boca y la meditación de mi corazón delante de ti, Oh Jehová, roca mía, y redentor mío”

— Salmos 19:14

“Panal de miel son los dichos suaves; Suavidad al alma y medicina para los huesos”

— Proverbios 16:24

“Que a nadie difamen, que no sean pendencieros, sino amables, mostrando toda mansedumbre para con todos los hombres”

— Tito 3:2

“Porque: El que quiere amar la vida Y ver días buenos, Refrene su lengua de mal, Y sus labios no hablen engaño”

— 1 Pedro 3:10

“Hay hombres cuyas palabras son como golpes de espada; Mas la lengua de los sabios es medicina”

— Proverbios 12:18

“Agravios maquina tu lengua; Como navaja afilada hace engaño”

— Salmos 52:2

“L que ahorra sus palabras tiene sabiduría; De espíritu prudente es el hombre entendido”

— Proverbios 17:27

“Ni palabras deshonestas, ni necedades, ni truhanerías, que no convienen, sino antes bien acciones de gracias”

— Efesios 5:4

“L hipócrita con la boca daña a su prójimo; Mas los justos son librados con la sabiduría”

— Proverbios 11:9

“No lo que entra en la boca contamina al hombre; mas lo que sale de la boca, esto contamina al hombre”

— Mateo 15:11

“L que guarda su boca y su lengua, Su alma guarda de angustias”

— Proverbios 21:23

“Pero ningún hombre puede domar la lengua, que es un mal que no puede ser refrenado, llena de veneno mortal”

— Santiago 3:8

“Pon guarda a mi boca, oh Jehová; Guarda la puerta de mis labios”

— Salmos 141:3

“La muerte y la vida están en poder de la lengua, Y el que la ama comerá de sus frutos”

— Proverbios 18:21

“Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes”

— Efesios 4:29

“Pero ahora dejad también vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, blasfemia, palabras deshonestas de vuestra boca”

— Colosenses 3:8

“L corazón del justo piensa para responder; Mas la boca de los impíos derrama malas cosas”

— Proverbios 15:28

“Hablará mi lengua tus dichos, Porque todos tus mandamientos son justicia”

— Salmos 119:172

“Palabra sana e irreprochable, de modo que el adversario se avergüence, y no tenga nada malo que decir de vosotros”

— Tito 2:8

“La muerte y la vida están en poder de la lengua, Y el que la ama comerá de sus frutos”

— Proverbios 18:21

“Así también la lengua es un miembro pequeño, pero se jacta de grandes cosas. He aquí, ¡cuán grande bosque enciende un pequeño fuego”

— Santiago 3:5

“Guarda tu lengua del mal, Y tus labios de hablar engaño”

— Salmos 34:13

“L hombre será saciado de bien del fruto de su boca; Y le será pagado según la obra de sus manos”

— Proverbios 12:14

“Pero sea vuestro hablar: Sí, sí; no, no; porque lo que es más de esto, de mal procede”

— Mateo 5:37

“Plata escogida es la lengua del justo; Mas el corazón de los impíos es como nada”

— Proverbios 10:20

“Quítense de vosotros toda amargura, enojo, ira, gritería y maledicencia, y toda malicia”

— Efesios 4:31

“Manzana de oro con figuras de plata Es la palabra dicha como conviene”

— Proverbios 25:11

“La lengua es un fuego, un mundo de maldad. La lengua está puesta entre nuestros miembros, y contamina todo el cuerpo, e inflama la rueda de la creación, y ella misma es inflamada por el infierno”

— Santiago 3:6

“Pon guarda a mi boca, oh Jehová; Guarda la puerta de mis labios”

— Salmos 141:3

“La lengua apacible es árbol de vida; Mas la perversidad de ella es quebrantamiento de espíritu”

— Proverbios 15:4

“Sea vuestra palabra siempre con gracia, sazonada con sal, para que sepáis cómo debéis responder a cada uno”

— Colosenses 4:6

“L corazón del sabio hace prudente su boca, Y añade gracia a sus labios”

— Proverbios 16:23

“Finalmente, sed todos de un mismo sentir, compasivos, amándoos fraternalmente, misericordiosos, amigables; no devolviendo mal por mal, ni maldición por maldición, sino por el contrario, bendiciendo, sabiendo que fuisteis llamados para que heredaseis bendición. Porque: El que quiere amar la vida Y ver días buenos, Refrene su lengua de mal, Y sus labios no hablen engaño”

— 1 Pedro 3:8-10

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