“Sean gratos los dichos de mi boca la meditación de mi corazón delante de tiOh Jehová, roca mía, redentor mío”
— Salmos 19:14
“Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad”
— Filipenses 4:8
“La palabra de Cristo more en abundancia en vosotros, enseñándoos exhortándoos unos a otros en toda sabiduría, cantando con gracia en vuestros corazones al Señor con salmos himnos cánticos espirituales”
— Colosenses 3:16
“En mi corazón he guardado tus dichosPara no pecar contra ti”
— Salmos 119:11
“Toda la Escritura es inspirada por Dios, útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia”
— 2 Timoteo 3:16
“Me acordé de los días antiguosMeditaba en todas tus obrasReflexionaba en las obras de tus manos”
— Salmos 143:5
“Fíate de Jehová de todo tu corazónY no te apoyes en tu propia prudenciaReconócelo en todos tus caminosY él enderezará tus veredas”
— Proverbios 3:5-6
“Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día de noche meditarás en él, para que guardes hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, todo te saldrá bien”
— Josué 1:8
“Orad sin cesar”
— 1 Tesalonicenses 5:17
“Lámpara es a mis pies tu palabraY lumbrera a mi camino”
— Salmos 119:105
“No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable perfecta”
— Romanos 12:2
“Porque la palabra de Dios es viva eficaz, más cortante que toda espada de dos filos; penetra hasta partir el alma el espíritu, las coyunturas los tuétanos, discierne los pensamientos las intenciones del corazón”
— Hebreos 4:12
“¡Oh, cuánto amo yo tu leyTodo el día es ella mi meditación”
— Salmos 119:97
“Nuestras cartas sois vosotros, escritas en nuestros corazones, conocidas leídas por todos los hombres; siendo manifiesto que sois carta de Cristo expedida por nosotros, escrita no con tinta, sino con el Espíritu del Dios vivo; no en tablas de piedra, sino en tablas de carne del corazón”
— 2 Corintios 3:2-3
“En mi corazón he guardado tus dichosPara no pecar contra ti”
— Salmos 119:11
“Pero sed hacedores de la palabra, no tan solamente oidores, engañándoos a vosotros mismos”
— Santiago 1:22
“El hombre bueno, del buen tesoro de su corazón saca lo bueno; el hombre malo, del mal tesoro de su corazón saca lo malo; porque de la abundancia del corazón habla la boca”
— Lucas 6:45
“Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazónPorque de él mana la vida”
— Proverbios 4:23
“Si confesamos nuestros pecados, él es fiel justo para perdonar nuestros pecados, limpiarnos de toda maldad”
— 1 Juan 1:9
“Lámpara es a mis pies tu palabraY lumbrera a mi camino”
— Salmos 119:105
“Ahora, hijo mío, a más de esto, sé amonestado. No hay fin de hacer muchos libros; el mucho estudio es fatiga de la carne”
— Eclesiastés 12:12
“¡Cuán dulces son a mi paladar tus palabrasMás que la miel a mi boca”
— Salmos 119:103
“Lámpara es a mis pies tu palabraY lumbrera a mi camino”
— Salmos 119:105
“Así será mi palabra que sale de mi boca; no volverá a mí vacía, sino que hará lo que yo quiero, será prosperada en aquello para que la envié”
— Isaías 55:11
“Encomienda a Jehová tus obrasY tus pensamientos serán afirmados”
— Proverbios 16:3
“Me buscaréis me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón”
— Jeremías 29:13
“Examíname, oh Dios, conoce mi corazónPruébame conoce mis pensamientosY ve si hay en mí camino de perversidadY guíame en el camino eterno”
— Salmos 139:23-24
“Hablando entre vosotros con salmos, con himnos cánticos espirituales, cantando alabando al Señor en vuestros corazones”
— Efesios 5:19
“Perseverad en la oración, velando en ella con acción de gracias”
— Colosenses 4:2
“Abre mis ojos, miraréLas maravillas de tu ley”
— Salmos 119:18
“Él respondió dijo: Escrito está: No solo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios”
— Mateo 4:4
“Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que usa bien la palabra de verdad”
— 2 Timoteo 2:15
“En mi corazón he guardado tus dichosPara no pecar contra ti”
— Salmos 119:11
“El consejo de Jehová permanecerá para siempreLos pensamientos de su corazón por todas las generaciones”
— Salmos 33:11
“¡Oh, cuánto amo yo tu leyTodo el día es ella mi meditaciónMe has hecho más sabio que mis enemigos con tus mandamientosPorque siempre están conmigo”
— Salmos 119:97-98
“Toda palabra de Dios es limpiaÉl es escudo a los que en él esperan”
— Proverbios 30:5
“Si permanecéis en mí, mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, os será hecho”
— Juan 15:7
“En mi corazón he guardado tus dichosPara no pecar contra ti”
— Salmos 119:11
“Estos eran más nobles que los que estaban en Tesalónica, pues recibieron la palabra con toda solicitud, escudriñando cada día las Escrituras para ver si estas cosas eran así”
— Hechos 17:11
“Examinadlo todo; retened lo bueno”
— 1 Tesalonicenses 5:21
“En mi corazón he guardado tus dichosPara no pecar contra ti”
— Salmos 119:11
“Mantengamos firme, sin fluctuar, la profesión de nuestra esperanza, porque fiel es el que prometió”
— Hebreos 10:23
“Para siempre, oh JehováPermanece tu palabra en los cielos”
— Salmos 119:89
“Tenemos también la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en estar atentos como a una antorcha que alumbra en lugar oscuro, hasta que el día esclarezca el lucero de la mañana salga en vuestros corazones”
— 2 Pedro 1:19
“En mi corazón he guardado tus dichosPara no pecar contra ti”
— Salmos 119:11
“Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público”
— Mateo 6:6
“Hijo mío, guarda mis razonesY atesora contigo mis mandamientosGuarda mis mandamientos vivirásY mi ley como las niñas de tus ojosLígalos a tus dedosEscríbelos en la tabla de tu corazón”
— Proverbios 7:1-3
“En mi corazón he guardado tus dichosPara no pecar contra ti”
— Salmos 119:11
“(porque por fe andamos, no por vista)”
— 2 Corintios 5:7
“En mi corazón he guardado tus dichosPara no pecar contra ti”
— Salmos 119:11
“Se deshace mi alma de ansiedadSusténtame según tu palabra”
— Salmos 119:28