38 Versículos bíblicos sobre Jesús, hermanos y hermanas

Versículos bíblicos sobre Jesús, hermanos y hermanas

“Porque todo aquel que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos, ese es mi hermano, hermana, madre”

— Mateo 12:50

“Porque todo aquel que hace la voluntad de Dios, ese es mi hermano, mi hermana, mi madre”

— Marcos 3:35

“Entonces Jesús les dijo: No temáis; id, dad las nuevas a mis hermanos, para que vayan a Galilea, allí me verán”

— Mateo 28:10

“Cuando vio Jesús a su madre, al discípulo a quien él amaba, que estaba presente, dijo a su madre: Mujer, he ahí tu hijo”

— Juan 19:26

“Jesús le dijo: No me toques, porque aún no he subido a mi Padre; mas ve a mis hermanos, diles: Subo a mi Padre a vuestro Padre, a mi Dios a vuestro Dios”

— Juan 20:17

“Entonces su madre sus hermanos vinieron a él; pero no podían llegar hasta él por causa de la multitud. se le avisó, diciendo: Tu madre tus hermanos están fuera quieren verte. Él entonces respondiendo, les dijo: Mi madre mis hermanos son los que oyen la palabra de Dios, la hacen”

— Lucas 8:19-21

“¿No es este el carpintero, hijo de María, hermano de Jacobo, de José, de Judas de Simón? ¿No están también aquí con nosotros sus hermanas? se escandalizaban de él”

— Marcos 6:3

“¿No es este el hijo del carpintero? ¿No se llama su madre María, sus hermanos, Jacobo, José, Simón Judas?”

— Mateo 13:55

“Dio a luz a su hijo primogénito, lo envolvió en pañales, lo acostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en el mesón”

— Lucas 2:7

“Cuando lo oyeron los suyos, vinieron para prenderle; porque decían: Está fuera de sí”

— Marcos 3:21

“Eran María Magdalena, Juana, María madre de Jacobo, las demás con ellas, quienes dijeron estas cosas a los apóstoles”

— Lucas 24:10

“Después de esto descendieron a Capernaum, él, su madre, sus hermanos sus discípulos; estuvieron allí no muchos días”

— Juan 2:12

“Entonces Jesús les dijo: No temáis; id, dad las nuevas a mis hermanos, para que vayan a Galilea, allí me verán”

— Mateo 28:10

“Le dijeron sus hermanos: Sal de aquí, vete a Judea, para que también tus discípulos vean las obras que haces. Porque ninguno que procura darse a conocer hace algo en secreto. Si estas cosas haces, manifiéstate al mundo. Porque ni aun sus hermanos creían en él”

— Juan 7:3-5

“Todos estos perseveraban unánimes en oración ruego, con las mujeres, con María la madre de Jesús, con sus hermanos”

— Hechos 1:14

“Pero no vi a ningún otro de los apóstoles, sino a Jacobo el hermano del Señor”

— Gálatas 1:19

“Por esto, mis amados hermanos, todo hombre sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para airarse”

— Santiago 1:19

“Porque el que santifica los que son santificados, de uno son todos; por lo cual no se avergüenza de llamarlos hermanos”

— Hebreos 2:11

“Otra vezYo confiaré en élY de nuevoHe aquí, yo los hijos que Dios me dio”

— Hebreos 2:13

“¿No tenemos derecho de traer con nosotros una hermana por mujer como también los otros apóstoles, los hermanos del Señor, Cefas?”

— 1 Corintios 9:5

“Pero yo os digo que cualquiera que se enoje contra su hermano, será culpable de juicio; cualquiera que diga: Necio, a su hermano, será culpable ante el concilio; cualquiera que le diga: Fatuo, quedará expuesto al infierno de fuego”

— Mateo 5:22

“El discípulo no es más que su maestro, ni el siervo más que su señor. Bástale al discípulo ser como su maestro, al siervo como su señor. Si al padre de familia llamaron Beelzebú, ¿cuánto más a los de su casa?”

— Mateo 10:24-25

“Por tanto, si tu hermano peca contra ti, ve repréndele estando tú él solos; si te oyere, has ganado a tu hermano. Mas si no te oyere, toma aún contigo a uno o dos, para que en boca de dos o tres testigos conste toda palabra. Si no los oyere a ellos, dilo a la iglesia; si no oyere a la iglesia, tenle por gentil publicano”

— Mateo 18:15-17

“Porque de aquí en adelante, cinco en una familia estarán divididos, tres contra dos, dos contra tres. Estará dividido el padre contra el hijo, el hijo contra el padre; la madre contra la hija, la hija contra la madre; la suegra contra su nuera, la nuera contra su suegra”

— Lucas 12:52-53

“Pero vosotros no queráis que os llamen Rabí; porque uno es vuestro Maestro, el Cristo, todos vosotros sois hermanos”

— Mateo 23:8

“El que ama a padre o madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a hijo o hija más que a mí, no es digno de mí”

— Mateo 10:37

“Si alguno viene a mí, no aborrece a su padre, madre, mujer, hijos, hermanos, hermanas, aun también su propia vida, no puede ser mi discípulo”

— Lucas 14:26

“Le dijeron sus hermanos: Sal de aquí, vete a Judea, para que también tus discípulos vean las obras que haces. Porque ninguno que procura darse a conocer hace algo en secreto. Si estas cosas haces, manifiéstate al mundo. Porque ni aun sus hermanos creían en él”

— Juan 7:3-5

“Todos estos perseveraban unánimes en oración ruego, con las mujeres, con María la madre de Jesús, con sus hermanos”

— Hechos 1:14

“Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos”

— Romanos 8:29

“Nuestra esperanza respecto de vosotros es firme, pues sabemos que así como sois compañeros en las aflicciones, también lo sois en la consolación”

— 2 Corintios 1:7

“Porque vosotros, hermanos, vinisteis a ser imitadores de las iglesias de Dios en Cristo Jesús que están en Judea; pues habéis padecido de los de vuestra propia nación las mismas cosas que ellas padecieron de los judíos”

— 1 Tesalonicenses 2:14

“Por lo cual debía ser en todo semejante a sus hermanos, para venir a ser misericordioso fiel sumo sacerdote en lo que a Dios se refiere, para expiar los pecados del pueblo”

— Hebreos 2:17

“Si un hermano o una hermana están desnudos, tienen necesidad del mantenimiento de cada día, alguno de vosotros les dice: Id en paz, calentaos saciaos, pero no les dais las cosas que son necesarias para el cuerpo, ¿de qué aprovecha?”

— Santiago 2:15-16

“En esto hemos conocido el amor, en que él puso su vida por nosotros; también nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos”

— 1 Juan 3:16

“La revelación de Jesucristo, que Dios le dio, para manifestar a sus siervos las cosas que deben suceder pronto; la declaró enviándola por medio de su ángel a su siervo Juan”

— Apocalipsis 1:1

“Yo me postré a sus pies para adorarle. él me dijo: Mira, no lo hagas; yo soy consiervo tuyo, de tus hermanos que retienen el testimonio de Jesús. Adora a Dios; porque el testimonio de Jesús es el espíritu de la profecía”

— Apocalipsis 19:10

“Pero él me dijo: Mira, no lo hagas; porque yo soy consiervo tuyo, de tus hermanos los profetas, de los que guardan las palabras de este libro. Adora a Dios”

— Apocalipsis 22:9