“Jehová es mi pastor; nada me faltaráEn lugares de delicados pastos me hará descansarJunto a aguas de reposo me pastorearáConfortará mi almaMe guiará por sendas de justicia por amor de su nombreAunque ande en valle de sombra de muerteNo temeré mal alguno, porque tú estarás conmigoTu vara tu cayado me infundirán alientoAderezas mesa delante de mí en presencia de mis angustiadoresUnges mi cabeza con aceite; mi copa está rebosandoCiertamente el bien la misericordia me seguirán todos los días de mi vidaY en la casa de Jehová moraré por largos días”
— Salmos 23
“Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas”
— Juan 10:11
“Porque así ha dicho Jehová el Señor: He aquí yo, yo mismo iré a buscar mis ovejas, las reconoceré”
— Ezequiel 34:11
“Como pastor apacentará su rebaño; en su brazo llevará los corderos, en su seno los llevará; pastoreará suavemente a las recién paridas”
— Isaías 40:11
“El Dios de paz que resucitó de los muertos a nuestro Señor Jesucristo, el gran pastor de las ovejas, por la sangre del pacto eterno”
— Hebreos 13:20
“Porque vosotros erais como ovejas descarriadas, pero ahora habéis vuelto al Pastor Obispo de vuestras almas”
— 1 Pedro 2:25
“Al ver las multitudes, tuvo compasión de ellas; porque estaban desamparadas dispersas como ovejas que no tienen pastor”
— Mateo 9:36
“¿Qué hombre de vosotros, teniendo cien ovejas, si pierde una de ellas, no deja las noventa nueve en el desierto, va tras la que se perdió, hasta encontrarla? cuando la encuentra, la pone sobre sus hombros gozoso; al llegar a casa, reúne a sus amigos vecinos, diciéndoles: Gozaos conmigo, porque he encontrado mi oveja que se había perdido. Os digo que así habrá más gozo en el cielo por un pecador que se arrepiente, que por noventa nueve justos que no necesitan de arrepentimiento”
— Lucas 15:4-7
“Volvió a decirle la segunda vez: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas? Pedro le respondió: Sí, Señor; tú sabes que te amo. Le dijo: Pastorea mis ovejas”
— Juan 21:16
“Por tanto, mirad por vosotros, por todo el rebaño en que el Espíritu Santo os ha puesto por obispos, para apacentar la iglesia del Señor, la cual él ganó por su propia sangre”
— Hechos 20:28
“Os daré pastores según mi corazón, que os apacienten con ciencia con inteligencia”
— Jeremías 3:15
“Porque el Cordero que está en medio del trono los pastoreará, los guiará a fuentes de aguas de vida; Dios enjugará toda lágrima de los ojos de ellos”
— Apocalipsis 7:17
“Hizo salir a su pueblo como ovejasY los llevó por el desierto como un rebaño”
— Salmos 78:52
“Pero se acordó de los días antiguos, de Moisés de su pueblo, diciendo: ¿Dónde está el que les hizo subir del mar con el pastor de su rebaño?, ¿dónde el que puso en medio de él su santo espíritu”
— Isaías 63:11
“Él estará, apacentará con poder de Jehová, con grandeza del nombre de Jehová su Dios; morarán seguros, porque ahora será engrandecido hasta los fines de la tierra”
— Miqueas 5:4
“Levántate, oh espada, contra el pastor, contra el hombre compañero mío, dice Jehová de los ejércitos. Hiere al pastor, serán dispersadas las ovejas; haré volver mi mano contra los pequeñitos”
— Zacarías 13:7
“Serán reunidas delante de él todas las naciones; apartará los unos de los otros, como aparta el pastor las ovejas de los cabritos”
— Mateo 25:32
“Yo soy el buen pastor; conozco mis ovejas, las mías me conocen”
— Juan 10:14
“Palabra fiel: Si alguno anhela obispado, buena obra desea. Pero es necesario que el obispo sea irreprensible, marido de una sola mujer, sobrio, prudente, decoroso, hospedador, apto para enseñar; no dado al vino, no pendenciero, no codicioso de ganancias deshonestas, sino amable, apacible, no avaro; que gobierne bien su casa, que tenga a sus hijos en sujeción con toda honestidad (pues el que no sabe gobernar su propia casa, ¿cómo cuidará de la iglesia de Dios?); no un neófito, no sea que envaneciéndose caiga en la condenación del diablo. También es necesario que tenga buen testimonio de los de afuera, para que no caiga en descrédito en lazo del diablo”
— 1 Timoteo 3:1-7
“Porque es necesario que el obispo sea irreprensible, como administrador de Dios; no soberbio, no iracundo, no dado al vino, no pendenciero, no codicioso de ganancias deshonestas, sino hospedador, amante de lo bueno, sobrio, justo, santo, dueño de sí mismo, retenedor de la palabra fiel tal como ha sido enseñada, para que también pueda exhortar con sana enseñanza convencer a los que contradicen”
— Tito 1:7-9
“Apacentad la grey de Dios que está entre vosotros, cuidando de ella, no por fuerza, sino voluntariamente; no por ganancia deshonesta, sino con ánimo pronto”
— 1 Pedro 5:2
“El Dios de paz que resucitó de los muertos a nuestro Señor Jesucristo, el gran pastor de las ovejas, por la sangre del pacto eterno, os haga aptos en toda obra buena para que hagáis su voluntad, haciendo él en vosotros lo que es agradable delante de él por Jesucristo; al cual sea la gloria por los siglos de los siglos. Amén”
— Hebreos 13:20-21
“Pondré sobre ellas pastores que las apacienten; no temerán más, ni se amedrentarán, ni serán menoscabadas, dice Jehová”
— Jeremías 23:4
“Levantaré sobre ellas a un pastor, él las apacentará; a mi siervo David, él las apacentará, él les será por pastor”
— Ezequiel 34:23
“Contra los pastores se ha encendido mi enojo, castigaré a los jefes; pero Jehová de los ejércitos visitará su rebaño, la casa de Judá, los pondrá como su caballo de honor en la guerra”
— Zacarías 10:3
“Oh Pastor de Israel, escuchaTú que pastoreas como a ovejas a JoséQue estás entre querubines, resplandece”
— Salmos 80:1
“Esos perros comilones son insaciables; los pastores mismos no saben entender; todos ellos siguen sus propios caminos, cada uno busca su propio provecho, cada uno por su lado”
— Isaías 56:11
“¿Qué os parece? Si un hombre tiene cien ovejas, se descarría una de ellas, ¿no deja las noventa nueve va por los montes a buscar la que se había descarriado? si acontece que la encuentra, de cierto os digo que se regocija más por aquella, que por las noventa nueve que no se descarriaron. Así, no es la voluntad de vuestro Padre que está en los cielos, que se pierda uno de estos pequeños”
— Mateo 18:12-14
“No temáis, manada pequeña, porque a vuestro Padre le ha placido daros el reino”
— Lucas 12:32
“Mis ovejas oyen mi voz, yo las conozco, me siguen”
— Juan 10:27
“Porque las cosas que se escribieron antes, para nuestra enseñanza se escribieron, a fin de que por la paciencia la consolación de las Escrituras, tengamos esperanza”
— Romanos 15:4
“En esto hemos conocido el amor, en que él puso su vida por nosotros; también nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos”
— 1 Juan 3:16
“Ella dio a luz un hijo varón, que regirá con vara de hierro a todas las naciones; su hijo fue arrebatado para Dios para su trono”
— Apocalipsis 12:5
“Reconoced que Jehová es DiosÉl nos hizo, no nosotros a nosotros mismosPueblo suyo somos, ovejas de su prado”
— Salmos 100:3
“He aquí que Jehová el Señor vendrá con poder, su brazo señoreará; he aquí que su recompensa viene con él, su paga delante de su rostro”
— Isaías 40:10
“Entonces Jesús les dijo: Todos vosotros os escandalizaréis de mí esta noche; porque escrito está: Heriré al pastor, las ovejas del rebaño serán dispersadas”
— Mateo 26:31
“Cuando llegaban ya cerca de la bajada del monte de los Olivos, toda la multitud de los discípulos, gozándose, comenzó a alabar a Dios a grandes voces por todas las maravillas que habían visto, diciendo: ¡Bendito el rey que viene en el nombre del Señor; paz en el cielo, gloria en las alturas”
— Lucas 19:37-38
“Mis ovejas oyen mi voz, yo las conozco, me siguen”
— Juan 10:27
“Os rogamos, hermanos, que reconozcáis a los que trabajan entre vosotros, os presiden en el Señor, os amonestan”
— 1 Tesalonicenses 5:12
“Los ancianos que gobiernan bien, sean tenidos por dignos de doble honor, mayormente los que trabajan en predicar enseñar”
— 1 Timoteo 5:17
“Presentándote tú en todo como ejemplo de buenas obras; en la enseñanza mostrando integridad, seriedad”
— Tito 2:7
“Que prediques la palabra; que instes a tiempo fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia doctrina”
— 2 Timoteo 4:2
“Si alguno habla, hable conforme a las palabras de Dios; si alguno ministra, ministre conforme al poder que Dios da, para que en todo sea Dios glorificado por Jesucristo, a quien pertenecen la gloria el imperio por los siglos de los siglos. Amén”
— 1 Pedro 4:11
“¿Está alguno enfermo entre vosotros? Llame a los ancianos de la iglesia, oren por él, ungiéndole con aceite en el nombre del Señor”
— Santiago 5:14
“Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas han salido por el mundo”
— 1 Juan 4:1
“Yo Jesús he enviado mi ángel para daros testimonio de estas cosas en las iglesias. Yo soy la raíz el linaje de David, la estrella resplandeciente de la mañana”
— Apocalipsis 22:16