48 Versículos bíblicos sobre el cínico

“L amor sea sin fingimiento. Aborreced lo malo, seguid lo bueno”

— Romanos 12:9

“L hombre de doble ánimo es inconstante en todos sus caminos”

— Santiago 1:8

“No toma placer el necio en la inteligencia, Sino en que su corazón se descubra”

— Proverbios 18:2

“Haced todo sin murmuraciones y contiendas”

— Filipenses 2:14

“No te apresures en tu espíritu a enojarte; porque el enojo reposa en el seno de los necios”

— Eclesiastés 7:9

“Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial”

— Mateo 6:14

“Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra”

— Colosenses 3:2

“L amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece”

— 1 Corintios 13:4

“Deja la ira, y desecha el enojo; No te excites en manera alguna a hacer lo malo”

— Salmos 37:8

“Fíate de Jehová de todo tu corazón, Y no te apoyes en tu propia prudencia”

— Proverbios 3:5

“Si alguno dice: Yo amo a Dios, y aborrece a su hermano, es mentiroso. Pues el que no ama a su hermano a quien ha visto, ¿cómo puede amar a Dios a quien no ha visto?”

— 1 Juan 4:20

“Porque nosotros también éramos en otro tiempo insensatos, rebeldes, extraviados, esclavos de concupiscencias y deleites diversos, viviendo en malicia y envidia, aborrecibles, y aborreciéndonos unos a otros”

— Tito 3:3

“Quítense de vosotros toda amargura, enojo, ira, gritería y maledicencia, y toda malicia”

— Efesios 4:31

“Mas los malos hombres y los engañadores irán de mal en peor, engañando y siendo engañados”

— 2 Timoteo 3:13

“Como queréis que hagan los hombres con vosotros, así también haced vosotros con ellos”

— Lucas 6:31

“Acercaos a Dios, y él se acercará a vosotros. Pecadores, limpiad las manos; y vosotros los de doble ánimo, purificad vuestros corazones”

— Santiago 4:8

“Ngaño hay en el corazón de los que piensan el mal; Pero alegría en el de los que piensan el bien”

— Proverbios 12:20

“Xaminadlo todo; retened lo bueno”

— 1 Tesalonicenses 5:21

“Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen”

— Mateo 5:44

“Desechando, pues, toda malicia, todo engaño, hipocresía, envidias, y todas las detracciones”

— 1 Pedro 2:1

“Mejor es confiar en Jehová Que confiar en el hombre”

— Salmos 118:8

“L corazón del justo piensa para responder; Mas la boca de los impíos derrama malas cosas”

— Proverbios 15:28

“Mirad bien, no sea que alguno deje de alcanzar la gracia de Dios; que brotando alguna raíz de amargura, os estorbe, y por ella muchos sean contaminados”

— Hebreos 12:15

“Os ruego, pues, hermanos, por el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que habléis todos una misma cosa, y que no haya entre vosotros divisiones, sino que estéis perfectamente unidos en una misma mente y en un mismo parecer”

— 1 Corintios 1:10

“Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe”

— Gálatas 5:22

“Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad”

— Filipenses 4:8

“La cual profesando algunos, se desviaron de la fe. La gracia sea contigo. Amén”

— 1 Timoteo 6:21

“Xaminaos a vosotros mismos si estáis en la fe; probaos a vosotros mismos. ¿O no os conocéis a vosotros mismos, que Jesucristo está en vosotros, a menos que estéis reprobados?”

— 2 Corintios 13:5

“L que dice que está en la luz, y aborrece a su hermano, está todavía en tinieblas”

— 1 Juan 2:9

“Pero si tenéis celos amargos y contención en vuestro corazón, no os jactéis, ni mintáis contra la verdad”

— Santiago 3:14

“L que tarda en airarse es grande de entendimiento; Mas el que es impaciente de espíritu enaltece la necedad”

— Proverbios 14:29

“Con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor”

— Efesios 4:2

“Soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro. De la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros”

— Colosenses 3:13

“Se llenó de amargura mi alma, Y en mi corazón sentía punzadas”

— Salmos 73:21

“Pero desecha las cuestiones necias e insensatas, sabiendo que engendran contiendas”

— 2 Timoteo 2:23

“Todas las cosas son puras para los puros, mas para los corrompidos e incrédulos nada les es puro; pues hasta su mente y su conciencia están corrompidas”

— Tito 1:15

“Así que, ya no nos juzguemos más los unos a los otros, sino más bien decidid no poner tropiezo u ocasión de caer al hermano”

— Romanos 14:13

“Así que, todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque esto es la ley y los profetas”

— Mateo 7:12

“L corazón alegre constituye buen remedio; Mas el espíritu triste seca los huesos”

— Proverbios 17:22

“Por esto, mis amados hermanos, todo hombre sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para airarse”

— Santiago 1:19

“Finalmente, sed todos de un mismo sentir, compasivos, amándoos fraternalmente, misericordiosos, amigables”

— 1 Pedro 3:8

“Guarda tu lengua del mal, Y tus labios de hablar engaño”

— Salmos 34:13

“Antes bien renunciamos a lo oculto y vergonzoso, no andando con astucia, ni adulterando la palabra de Dios, sino por la manifestación de la verdad recomendándonos a toda conciencia humana delante de Dios”

— 2 Corintios 4:2

“Hijitos míos, no amemos de palabra ni de lengua, sino de hecho y en verdad”

— 1 Juan 3:18

“Mirad bien, no sea que alguno deje de alcanzar la gracia de Dios; que brotando alguna raíz de amargura, os estorbe, y por ella muchos sean contaminados”

— Hebreos 12:15

“Panal de miel son los dichos suaves; Suavidad al alma y medicina para los huesos”

— Proverbios 16:24

“Que procuréis tener tranquilidad, y ocuparos en vuestros negocios, y trabajar con vuestras manos de la manera que os hemos mandado”

— 1 Tesalonicenses 4:11

“Nada hagáis por contienda o por vanagloria; antes bien con humildad, estimando cada uno a los demás como superiores a él mismo”

— Filipenses 2:3