44 Versículos bíblicos sobre las puertas

Versículos bíblicos sobre las puertas

“Yo conozco tus obras; he aquí, he puesto delante de ti una puerta abierta, la cual nadie puede cerrar; porque aunque tienes poca fuerza, has guardado mi palabra, no has negado mi nombre”

— Apocalipsis 3:8

“Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo; entrará, saldrá, hallará pastos”

— Juan 10:9

“Entrad por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta, espacioso el camino que lleva a la perdición, muchos son los que entran por ella; porque estrecha es la puerta, angosto el camino que lleva a la vida, pocos son los que la hallan”

— Mateo 7:13-14

“Después de esto miré, he aquí una puerta abierta en el cielo; la primera voz que oí, como de trompeta, hablando conmigo, dijo: Sube acá, yo te mostraré las cosas que sucederán después de estas”

— Apocalipsis 4:1

“Jesús le dijo: Yo soy el camino, la verdad, la vida; nadie viene al Padre, sino por mí”

— Juan 14:6

“Abridme las puertas de la justiciaEntraré por ellas, alabaré a JAH”

— Salmos 118:19

“Bienaventurado el hombre que me escuchaVelando a mis puertas cada díaAguardando a los postes de mis puertas”

— Proverbios 8:34

“Pondré la llave de la casa de David sobre su hombro; abrirá, nadie cerrará; cerrará, nadie abrirá”

— Isaías 22:22

“Sus puertas nunca serán cerradas de día, pues allí no habrá noche”

— Apocalipsis 21:25

“Habiendo llegado, reunido a la iglesia, refirieron cuán grandes cosas había hecho Dios con ellos, cómo había abierto la puerta de la fe a los gentiles”

— Hechos 14:27

“Esforzaos a entrar por la puerta angosta; porque os digo que muchos procurarán entrar, no podrán”

— Lucas 13:24

“He aquí, yo estoy a la puerta llamo; si alguno oye mi voz abre la puerta, entraré a él, cenaré con él, él conmigo”

— Apocalipsis 3:20

“Si Jehová no edificare la casaEn vano trabajan los que la edificanSi Jehová no guardare la ciudadEn vano vela la guardia”

— Salmos 127:1

“Tus puertas estarán de continuo abiertas; no se cerrarán de día ni de noche, para que a ti sean traídas las riquezas de las naciones, conducidos a ti sus reyes”

— Isaías 60:11

“Le dijo entonces Pilato: ¿Luego, eres tú rey? Respondió Jesús: Tú dices que yo soy rey. Yo para esto he nacido, para esto he venido al mundo, para dar testimonio a la verdad. Todo aquel que es de la verdad, oye mi voz”

— Juan 18:37

“Sus puertas nunca serán cerradas de día, pues allí no habrá noche”

— Apocalipsis 21:25

“Pero mientras ellas iban a comprar, vino el esposo; las que estaban preparadas entraron con él a las bodas; se cerró la puerta”

— Mateo 25:10

“Escribe al ángel de la iglesia en Filadelfia: Esto dice el Santo, el Verdadero, el que tiene la llave de David, el que abre ninguno cierra, cierra ninguno abre”

— Apocalipsis 3:7

“Sin embargo, mandó a las nubes de arribaY abrió las puertas de los cielos”

— Salmos 78:23

“Volvió, pues, Jesús a decirles: De cierto, de cierto os digo: Yo soy la puerta de las ovejas”

— Juan 10:7

“Bienaventurados los que lavan sus ropas, para tener derecho al árbol de la vida, para entrar por las puertas en la ciudad”

— Apocalipsis 22:14

“Yo os digo: Pedid, se os dará; buscad, hallaréis; llamad, se os abrirá”

— Lucas 11:9

“Por el camino nuevo vivo que él nos abrió a través del velo, esto es, de su carne”

— Hebreos 10:20

“Entonces vi el cielo abierto; he aquí un caballo blanco, el que lo montaba se llamaba Fiel Verdadero, con justicia juzga pelea”

— Apocalipsis 19:11

“Cuando llegué a Troas para predicar el evangelio de Cristo, aunque se me abrió puerta en el Señor”

— 2 Corintios 2:12

“Dijo Josué a todo el pueblo: He aquí esta piedra nos servirá de testigo, porque ella ha oído todas las palabras que Jehová nos ha hablado; será, pues, testigo contra vosotros, para que no mintáis contra vuestro Dios”

— Josué 24:27

“Esta es puerta de JehováPor ella entrarán los justos”

— Salmos 118:20

“No entrará en ella ninguna cosa inmunda, o que hace abominación mentira, sino solamente los que están inscritos en el libro de la vida del Cordero”

— Apocalipsis 21:27

“Yo también te digo, que tú eres Pedro, sobre esta roca edificaré mi iglesia; las puertas del Hades no prevalecerán contra ella”

— Mateo 16:18

“Al que venciere, yo lo haré columna en el templo de mi Dios, nunca más saldrá de allí; escribiré sobre él el nombre de mi Dios, el nombre de la ciudad de mi Dios, la nueva Jerusalén, la cual desciende del cielo, de mi Dios, mi nombre nuevo”

— Apocalipsis 3:12

“Alzad, oh puertas, vuestras cabezasY alzaos vosotras, puertas eternasY entrará el Rey de gloria”

— Salmos 24:7

“Yo Juan vi la santa ciudad, la nueva Jerusalén, descender del cielo, de Dios, dispuesta como una esposa ataviada para su marido”

— Apocalipsis 21:2

“Abrid las puertas, entrará la gente justa, guardadora de verdades”

— Isaías 26:2

“El que venciere será vestido de vestiduras blancas; no borraré su nombre del libro de la vida, confesaré su nombre delante de mi Padre, delante de sus ángeles”

— Apocalipsis 3:5

“Orando también al mismo tiempo por nosotros, para que el Señor nos abra puerta para la palabra, a fin de dar a conocer el misterio de Cristo, por el cual también estoy preso”

— Colosenses 4:3

“Me dijo Jehová: Esta puerta estará cerrada; no se abrirá, ni entrará por ella hombre, porque Jehová Dios de Israel entró por ella; estará, por tanto, cerrada”

— Ezequiel 44:2

“El séptimo ángel derramó su copa por el aire; salió una gran voz del templo del cielo, del trono, diciendo: Hecho está”

— Apocalipsis 16:17

“He aquí vino un leproso se postró ante él, diciendo: Señor, si quieres, puedes limpiarme”

— Mateo 8:2

“Oí una gran voz del cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, él morará con ellos; ellos serán su pueblo, Dios mismo estará con ellos como su Dios”

— Apocalipsis 21:3

“Lámpara es a mis pies tu palabraY lumbrera a mi camino”

— Salmos 119:105

“Otra vez Jesús les habló, diciendo: Yo soy la luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida”

— Juan 8:12

“Vi también a otro ángel que subía de donde sale el sol, tenía el sello del Dios vivo; clamó a gran voz a los cuatro ángeles, a quienes se les había dado el poder de hacer daño a la tierra al mar”

— Apocalipsis 7:2

“El templo de Dios fue abierto en el cielo, el arca de su pacto se veía en el templo. hubo relámpagos, voces, truenos, un terremoto grande granizo”

— Apocalipsis 11:19

“Estaban siempre en el templo, alabando bendiciendo a Dios. Amén”

— Lucas 24:53