Queridos amigos, aquí les comparto 48 Versículos bíblicos sobre las cargas, que creo les ayudarán a comprender este tema si están interesados. Porque aquí en todos los versículos bíblicos que he compartido hay algunos versículos que están directamente relacionados con este tema de la Biblia y he compartido algunos otros versículos que están relacionados con este tema.
Aquí podrás ver estos versículos en un estilo de coloración muy hermoso. Que puedes compartir con tus amigos y familiares tomando una captura de pantalla.
Espero que puedas aprender algo de este tema hoy. Vayamos ahora a los versículos bíblicos. Que Dios los bendiga abundantemente, gracias.
“Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar”
— Mateo 11:28
“Cha sobre Jehová tu carga, y él te sustentará; No dejará para siempre caído al justo”
— Salmos 55:22
“Chando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros”
— 1 Pedro 5:7
“Porque atan cargas pesadas y difíciles de llevar, y las ponen sobre los hombros de los hombres; pero ellos ni con un dedo quieren moverlas”
— Mateo 23:4
“Sobrellevad los unos las cargas de los otros, y cumplid así la ley de Cristo”
— Gálatas 6:2
“Porque mis iniquidades se han agravado sobre mi cabeza; Como carga pesada se han agravado sobre mí”
— Salmos 38:4
“Desfallecerás del todo, tú, y también este pueblo que está contigo; porque el trabajo es demasiado pesado para ti; no podrás hacerlo tú solo”
— Éxodo 18:18
“Bendito el Señor; cada día nos colma de beneficios El Dios de nuestra salvación. Selah”
— Salmos 68:19
“Él da esfuerzo al cansado, y multiplica las fuerzas al que no tiene ningunas”
— Isaías 40:29
“Ncomienda a Jehová tu camino, Y confía en él; y él hará”
— Salmos 37:5
“Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal”
— Mateo 6:34
“Diciendo: Padre, si quieres, pasa de mí esta copa; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya”
— Lucas 22:42
“Cha sobre Jehová tu carga, y él te sustentará; No dejará para siempre caído al justo”
— Salmos 55:22
“Porque hermanos, no queremos que ignoréis acerca de nuestra tribulación que nos sobrevino en Asia; pues fuimos abrumados sobremanera más allá de nuestras fuerzas, de tal modo que aun perdimos la esperanza de conservar la vida. Pero tuvimos en nosotros mismos sentencia de muerte, para que no confiásemos en nosotros mismos, sino en Dios que resucita a los muertos; el cual nos libró, y nos libra, y en quien esperamos que aún nos librará, de tan gran muerte”
— 2 Corintios 1:8-10
“Jehová, escucha mi oración, Y llegue a ti mi clamor. No escondas de mí tu rostro en el día de mi angustia; Inclina a mí tu oído; Apresúrate a responderme el día que te invocare”
— Salmos 102:1-2
“Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado. Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro”
— Hebreos 4:15-16
“Desde el cabo de la tierra clamaré a ti, cuando mi corazón desmayare. Llévame a la roca que es más alta que yo”
— Salmos 61:2
“No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia”
— Isaías 41:10
“Tú, pues, sufre penalidades como buen soldado de Jesucristo”
— 2 Timoteo 2:3
“Claman los justos, y Jehová oye, Y los libra de todas sus angustias. Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón; Y salva a los contritos de espíritu”
— Salmos 34:17-18
“Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro”
— Romanos 8:38-39
“Me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo”
— 2 Corintios 12:9
“Los que sembraron con lágrimas, con regocijo segarán”
— Salmos 126:5
“Stas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo”
— Juan 16:33
“Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús”
— Filipenses 4:6-7
“¿Y quién de vosotros podrá, por mucho que se afane, añadir a su estatura un codo?”
— Mateo 6:27
“Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas, sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia. Mas tenga la paciencia su obra completa, para que seáis perfectos y cabales, sin que os falte cosa alguna”
— Santiago 1:2-4
“Él sana a los quebrantados de corazón, Y venda sus heridas”
— Salmos 147:3
“Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; y si por los ríos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti”
— Isaías 43:2
“Sforzaos todos vosotros los que esperáis en Jehová, Y tome aliento vuestro corazón”
— Salmos 31:24
“Njugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron”
— Apocalipsis 21:4
“Gozosos en la esperanza; sufridos en la tribulación; constantes en la oración”
— Romanos 12:12
“Jehová será refugio del pobre, Refugio para el tiempo de angustia”
— Salmos 9:9
“Sean vuestras costumbres sin avaricia, contentos con lo que tenéis ahora; porque él dijo: No te desampararé, ni te dejaré”
— Hebreos 13:5
“Sino gozaos por cuanto sois participantes de los padecimientos de Cristo, para que también en la revelación de su gloria os gocéis con gran alegría. Si sois vituperados por el nombre de Cristo, sois bienaventurados, porque el glorioso Espíritu de Dios reposa sobre vosotros. Ciertamente, de parte de ellos, él es blasfemado, pero por vosotros es glorificado”
— 1 Pedro 4:13-14
“Claman los justos, y Jehová oye, Y los libra de todas sus angustias”
— Salmos 34:17
“Porque de cierto, cuando vinimos a Macedonia, ningún reposo tuvo nuestro cuerpo, sino que en todo fuimos atribulados; de fuera, conflictos; de dentro, temores”
— 2 Corintios 7:5
“Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado”
— Isaías 26:3
“Mi carne y mi corazón desfallecen; Mas la roca de mi corazón y mi porción es Dios para siempre”
— Salmos 73:26
“Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de misericordias y Dios de toda consolación, el cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquier tribulación, por medio de la consolación con que nosotros somos consolados por Dios”
— 2 Corintios 1:3-4
“La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo”
— Juan 14:27
“Cha sobre Jehová tu carga, y él te sustentará; No dejará para siempre caído al justo”
— Salmos 55:22
“¿No se venden dos pajarillos por un cuarto? Con todo, ni uno de ellos cae a tierra sin vuestro Padre. Pues aun vuestros cabellos están todos contados. Así que, no temáis; más valéis vosotros que muchos pajarillos”
— Mateo 10:29-31
“Por lo cual, animaos unos a otros, y edificaos unos a otros, así como lo hacéis”
— 1 Tesalonicenses 5:11
“Desde la angustia invoqué a JAH, Y me respondió JAH, poniéndome en lugar espacioso”
— Salmos 118:5
“Njugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron”
— Apocalipsis 21:4
“Por tanto, hermanos, tened paciencia hasta la venida del Señor. Mirad cómo el labrador espera el precioso fruto de la tierra, aguardando con paciencia hasta que reciba la lluvia temprana y la tardía. Tened también vosotros paciencia, y afirmad vuestros corazones; porque la venida del Señor se acerca”
— Santiago 5:7-8
“Dios es nuestro amparo y fortaleza, Nuestro pronto auxilio en las tribulaciones”
— Salmos 46:1